El 15-M sale a la calle para mostrar su rechazo a la reforma constitucional
Los ‘indignados’ exigen un referéndum y critican la «urgencia» de PSOE y PP.
«Lo llaman democracia y no lo es». Este fue, otra vez, el grito más coreado en la manifestación de los indignados , ayer en Madrid. La marcha, convocada por el movimiento 15-M, protestó por la reforma de la Constitución acordada por PSOE y PP, que se aprobará en el Congreso de los Diputados esta semana, y para exigir que se someta a referéndum.
Bajo el lema «El pueblo también cuenta, referéndum ya», los asistentes a la manifestación mostraron su desacuerdo con con el pacto alcanzado por los dos grandes partidos y exigieron al Gobierno la necesidad de que se someta a votación la reforma de la Carta Magna. «Mi Constitución la voto yo» fue la pancarta que más se vio durante la manifestación. Además de protestar contra la reforma constitucional, la banca, y en especial el presidente del banco Santander, Emilio Botín, fue el blanco de todas las iras. «La deuda que la paguen los corruptos y los banqueros» era lo que rezaban numerosas pancartas.
Sin incidentes. La manifestación, que se celebró por las calles del centro de Madrid, discurrió sin incidentes destacables. El único momento de tensión en la marcha se produjo cuando un ciudadano se situó en la cabecera de la manifestación y comenzó a increpar a varios de los presentes por portar la bandera republicana. «Esa no es mi bandera y no la quiero aquí», les señaló el hombre visiblemente exaltado. Al final dos antidisturbios se llevaron al hombre y el incidente no paso a mayores. Fue la única nota negativa de la tarde. El resto de la marcha transcurrió bajo un ambiente festivo.
La marcha arrancó a las seis de la tarde desde la glorieta de Atocha y tras pasar por el paseo del Prado y la calle de Alcalá, terminó en la Puerta del Sol. Allí tras finalizar la marcha comenzó una asamblea para tratar y debatir la reforma constitucional. La necesidad de celebrar una consulta popular fue el principal tema que se trató. Desde el movimiento 15-M se critica la «inusitada urgencia» para efectuar la reforma constitucional y por estar redactada «al dictado de los mercados y de los gobiernos conservadores de las potencias europeas»
Además de la manifestación en Madrid, ayer se celebraron protestas en numerosas ciudades españolas. En Barcelona, Bilbao, San Sebastián, Santiago de Compostela o Valencia los simpatizantes del 15M salieron también a la calle para expresar su rechazo.