ENTREVISTA | MANUEL DOMINGUEZ CHICO. CANDIDATO AL SENADO IU
«En España ha habido turnismo, no una verdadera democracia»
Tiene claras sus ideas. Sobre León y sobre una democracia como la española donde, dice, se vota por miedo o por rencor. El voto a Izquierda Unida, añade, es el único que puede cambiar las cosas. Un apoyo para un modelo basado en lo público. En la defensa de la sanidad, la educación... «Una verdadera democracia».
Tiene 52 años, trabaja en una empresa de congelados de León y llega a las listas del Senado de IU desde los movimientos ecologistas. Manuel Domínguez Chico lleva la política en la sangre. Con las ideas muy claras.
—¿Ve posible, en una provincia como León y viendo resultados anteriores, conseguir el acta de senador?
—Es posible. Es difícil, pero no perdemos la esperanza.
—¿Y qué sería lo primero que haría en la Cámara Alta?
—De entrada, creo que es una Cámara a la que no se da la importancia necesaria. Es verdad que, hasta ahora, se lo ha ganado a pulso. Yo lo primero que haría sería pintarla en rojo y hacerla funcionar, empezando por una reforma en profundidad.
—Estamos en tiempos difíciles: los mercados, la prima de riesgo, recortes por todas partes... ¿Son las elecciones más importantes de la democracia?
—Las circunstancias, sí. Pero son unas elecciones más. En este país se ha venido votando históricamente por rencor o por miedo con eso de que viene la derecha. Lo que ha habido hasta ahora es turnismo, si se me permite la definición, pero no una verdadera alternancia. La alternativa es independencia y nosotros, Izquierda Unida, somos independientes de las élites financieras y económicas. Los que nos presentamos, y a los que representamos son gente de izquierda, trabajadores, no políticos, con un compromiso muy claro que llevamos hasta las últimas consecuencias. No somos de los que prometemos una cosa y hacemos otra.
—¿A León le está castigando la crisis más que a otros territorios?
—Sí. No viene de lo que ha pasado en estos últimos años, sino de más atrás. Los planes del carbón no han servido para reindustrializar las cuencas, que eran y son todavía uno de los motores económicos de la provincia. Somos generadores de energía, pero esa energía se va después a otros territorios para crear allí empresas. Y ha pasado lo mismo con la agricultura y la ganadería. Sólo han ido a peor por falta de una política seria y productivo. No se ha apoyado estos sectores para que generaran riqueza. Aquí se ha producido, pero no se ha transformado. Ese valor añadido se ha ido a otros países.
—Me puede explicar en pocas palabras sus grandes retos.
—En primer lugar, una defensa del sector público. Hay un nicho importante de empleo todavía. Por ejemplo, las residencias de la tercera edad. Casi todas son privadas y caras cuando podrían promoverse desde las instituciones. En segundo lugar, hay que blindar el estado del bienestar. Bueno, más bien del medio estar, porque no hemos llegado nunca a los niveles de otros países. Y así muchas cosas más con políticas de izquierda. Políticas que en Izquierda Unida tenemos muy claras.
—¿Izquierda Unida recogerá el testigo, o mejor dicho, los votos del 15-M en las elecciones del próximo domingo?
—Muchos ya estaban en IU. No tenemos problemas en incorporar a todos aquellos que se quieran sumar. Desde luego en el movimiento del 15-M hay gente muy preparada.
—¿El nuevo gobierno que salga de las elecciones traerá soluciones, o sólo recortes?
—Desde luego, no creo que el Partido Popular tenga la solución a lo que está pasando. Defienden a unas élites y un modelo de sociedad, y no creo tampoco que puedan revivir el milagro de 1996. Es equivocado ese análisis. IU no está en contra del mercado, pero nosotros defendemos otras políticas. Hay sectores que no se deberían tocar. Por algo en Noruega el petróleo está en manos de una empresa pública. Nuestras recetas no son nuevas. Son la defensa de la sanidad, de la educación... En manos privadas pueden ser más rentables, pero eficaces, no.
—¿Qué opinión le merece Alfredo Pérez Rubalcaba?
—Tiene por delante una tarea muy difícil. Creo que es una persona preparada. También creo que ha tenido la oportunidad de haberse ido. Tengo amigos en el PSOE, no me importa decirlo, pero no creo que pueda remontar la catarsis que se les viene encima. Poner a Rubalcaba creo que ha sido una decisión equivocada.
—¿Y Mariano Rajoy?
—Es un político gris. Tiene la estampa de un registrador de la Propiedad.