Javier Vidal. profesor de métodos de investigación en educación
«La orientación es clave para evitar el abandono»
El profesor de Métodos de Investigación en Educación de la Universidad de León, Javier Vidal, no calificó de muy preocupante la cifra de abandono que se registra en la Universidad de León, que está por debajo de la media del país según los últimos estudios.
Vidal, experto en investigación de la educación superior, sí quiso distinguir entre el abandono «real», es decir, el que se produce cuando los alumnos dejan de estudiar para siempre y el que se da cuando cambian de una titulación o una universidad a otra. Una tercera vertiente es el hecho de que un alumno deje los estudios y al cabo de uno o varios años regrese a la universidad.
En el caso del primero, destacó Javier Vidal, «hay muchas razones, sociales y personales, por las que un alumno entra y sale del sistema educativo, en una edad en la que hay que tomar decisiones en base a una situación familiar o un proyecto de vida». A estos hay que sumar aquellos que empiezan una carrera y comprueban que «es demasiado dura o exigente y deciden no seguir».
Asegura que las cifras en las que se mueve la ULE son bastante normales y pone un ejemplo: «Es cómo pretender que en unas elecciones fueran a votar todos los que están llamados a las urnas, es casi imposible y con un 70% de participación ya parece lo normal».
En cuanto a los que cambian de carrera se dan varias circunstancias. Así, el que fuera vicerrector de Calidad en el anterior equipo rectoral esgrime que puede ser porque no opten por la carrera adecuada, porque el sistema de acceso no permite estudiar en el lugar deseado «por lo que buscan otras alternativas para llegar a la universidad preferida», motivos vocacionales o gustos, así como el nivel de exigencia de las carreras. En este sentido, Vidal hace hincapié en que carreras como las de Ciencias de la Salud tienen una mínima tasa de abandono porque son «muy vocacionales». Aquellas con unas cifras más elevadas también hay que valorar la edad con la que se matriculan los alumnos en la universidad, en algunos casos elevada al regresar de nuevo.
A la hora de corregir esta desviación, Javier Vidal propone aumentar las acciones de orientación a los alumnos de la ESO y del Bachiller. «En ese momento tienen que tomar la decisión sobre qué quieren estudiar y cuanta más información tengan mucho mejor». A este respecto destaca el incremento de las acciones que la ULE ha desarrollado en los últimos años dirigidas a estos jóvenes, lo que se traduce en una tasa de abandono inferior a la registrada años atrás. «La primera decisión la tienen que tener muy clara», asevera el que fuera director general de Universidades del Ministerio de Educación en los años 2006-2009.
Defiende también una oferta diversa para «aumentar las posibilidades de elegir» cuando los jóvenes se enfrentan «a un gran salto que existe entre bachiller y la universidad».
Sobre los recortes planteados por el Ministerio de Educación, Vidal defiende que hay que ser prudente a la hora de valorar los motivos por los que se acometen. De hecho, resalta que la única justificación es que no hay dinero para financiar el sistema universitario y deja claro que no hay que buscar argumentos como la tasa de abandono para tomarlas. Javier Vidal reconoció el valor que debe de tener la formación universitaria recibida por aquellos alumnos que no llegan a terminar la carrera para evitar que sea «símbolo del fracaso».