Londres se desentiende del conflicto entre Gibraltar y España por la pesca
Al no poder evitar la visita del hijo de Isabel II al Peñón se suspendió el viaje de la reina.
El Gobierno británico se desentendió del conflicto entre Gibraltar y España por la pesca de barcos españoles en aguas de la bahía de Algeciras que la colonia reivindica como suyas. Es un asunto que «compete a las autoridades» gibraltareñas, señaló un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores del Ejecutivo de David Cameron, que no hizo ningún comentario sobre la cancelación del viaje de la Reina a Londres para participar en los actos conmemorativos de los 60 años de reinado de Isabel II.
El gesto hostil del Gobierno español hacia el británico no mereció ninguna respuesta por parte de las autoridades del Reino Unido. El asunto, para Londres, es un problema bilateral entre Madrid y Gibraltar porque «la gestión medioambiental» de las aguas en disputa corresponde a la colonia y no a la metrópoli. La prensa británica, en cambio, no fue tan comedida. La mayoría de los rotativos consideró un desaire la ausencia inducida por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, que consideró «poco adecuado en las circunstancias actuales» que la Reina participase en los festejos del sexagésimo aniversario de la coronación de Isabel II. The Sun señaló que el Ejecutivo español ha elevado «la tensión a un nuevo nivel» y The Times indicó que Londres y Madrid están «envueltos en una nueva disputa diplomática». El tono de los comentarios, sin embargo, no destiló acritud ni belicosidad.
Aunque la versión del Gobierno de Rajoy responsabiliza de la suspensión del viaje al conflicto pesquero, fuentes gubernamentales admitieron que la razón de fondo está en la visita el próximo mes del Príncipe Eduardo de Inglaterra y su esposa a Gibraltar. Desde que se conoció la semana pasada la visita de los condes de Wessex al Peñón Exteriores negoció con el Foreign Office la suspensión de la misma, y ante la imposibilidad de hacer cambiar de opinión al Gobierno británico se decidió cancelar el viaje de la Reina a Londres.
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, sin embargo, se enrocó en la versión oficial y explicó desde Brasilia, donde está de visita, que se pidió a la Casa del Rey la suspensión del viaje para evitar que la presencia de la Reina coincidiera con un hipotético enfrentamiento entre los pescadores gaditanos y la Policía gibraltareña.
García-Margallo también indicó que el motivo de la cancelación de la visita fue el incidente pesquero y no la visita del hijo menor de Isabel II y su esposa a Gibraltar el mes próximo.
El Ejecutivo, además de considerar inconveniente el desplazamiento de doña Sofía, ha aumentado, como muestra de su malestar, los controles en la verja fronteriza.
El Gobierno asimismo ha ordenado a la Guardia Civil que escolte a los barcos que quieran pescar en las aguas en disputa.
En el Peñón, sin embargo, tratan de quitar hierro al conflicto y el ministro principal, Fabian Picardo, dijo en Onda Cero que la disputa pesquera está «a un pelo» de solucionarse.