«No eran hoteles de lujo sino de cuatro estrellas»
Carlos Dívar llegó a la sede del Consejo con el objetivo de intentar sacudirse la imagen de opulencia y despilfarro, sobre todo después de que tildara de «miseria» los 13.000 euros de dinero público que se gastó en Marbella. Algunas de sus explicaciones, sin embargo, provocaron indisimuladas sonrisas entre los asistentes a su comparecencia, a la que también acudieron varios jueces.
«¿No le parece irresponsable en los tiempos que corren alojarse en hoteles de lujo en Marbella?», le preguntaron. «No eran de lujo, eran de cuatro estrellas, y eran bastante económicos para la zona», arguyó el jefe de los magistrados. ¿Y sobre las 40 cenas en esos hoteles de la Costa del Sol? «Una cosa es que el restaurante pueda ser más o menos lujoso, y otra el precio del servicio. Eso se ve en las facturas. De esas cenas, hay una pluralidad muy grande que he pagado yo. Además, los gastos no eran excesivamente cuantiosos para la personas que estábamos», se justificó.
¿Y 20 viajes en menos de cuatro años a su Málaga natal a cuenta del bolsillo del contribuyente? «Tenía que tener contacto directo con la realidad del momento (de la justicia malagueña). Es un viaje cada dos meses. No son tantos viajes».
«Gasto por gasto»
La Unión Progresista de Fiscales (UPF) consideró ayer que «la única salida honrosa» a la situación creada por los viajes a Marbella del presidente del CGPJ, Carlos Dívar, es explicar «gasto por gasto».
«La única salida honrosa y la única solución que sirve es aclarar gasto por gasto», apuntó María Moretó, presidenta de la UPF.