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Sindicatos y patronal aceptan los recortes del Gobierno si se compensan hasta el 2018

Industria debe responder al acuerdo, que pide garantizar empleo y viabilidad y convocar la Mesa del Carbón.

Un momento de la Marcha Negra, que llevó a los mineros a Madrid el pasado 11 de julio.

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m. rabanillo | león
León

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El Ministerio de Industria ya tiene en su poder el acuerdo sellado la madrugada del pasado jueves por las federaciones de Industria de los sindicatos UGT y CC.OO. y Carbunión que podría suponer el primer paso para dar luz a un conflicto enquistado desde su inicio, hace dos meses. Se trata de un documento consensuado por los agentes sociales en el que se aceptan los recortes impuestos por el Gobierno a las ayudas a la producción de carbón nacional en los presupuestos de este año y que ha generado un grave conflicto laboral en los últimos dos meses.

El acuerdo, sellado por el presidente de Carbunión, Victorino Alonso, y Juan Carlos Álvarez Liébana y Víctor Fernández de CC.OO. y UGT, respectivamente, ofrece el estudio de «posibles mecanismos» en los que la reducción de ayudas hasta 2018 coincida con el plan de cierre remitido por el Gobierno a Bruselas en febrero de este año. Patronal y sindicatos están dispuestos a negociar «cualquier solución que permita salvar el 2012, sin incremento de los presupuestos generales del Estado recientemente aprobados», según se recoge en el documento. El plan de cierre de las minas que el Gobierno remitió a Bruselas contemplaba que las ayudas a las explotaciones se iban a reducir un 10 % en 2012 desde los 301 millones de euros de 2011. Sin embargo, los presupuestos del Gobierno han dejado esta partida en 111 millones, lo que supone una merma del 63%.

La pelota ahora está en el tejado del departamento que dirige José Manuel Soria, que no se ha pronunciado sobre el acuerdo. Las previsiones para los próximos años en el Plan de Cierre recoge una disminución paulatina de las ayudas respecto al importe de 2011, con un 14,5% en 2013, un 25% en 2014, otro 25% en 2015, un 40% en 2016, un 60% en 2017 y un 75 % en 2018.

Empleo y viabilidad

Las partes explicitan su intención de contribuir a un «razonable desbloqueo de la paralización de las negociaciones», en todo momento sin «prejuzgar» el «irrenunciable» cumplimiento de los acuerdos suscritos por el Plan del Carbón 2006-2012, ni tampoco los términos en los que se deberá negociar el siguiente Plan 2013-2018.

Patronal y sindicatos piden al Ejecutivo que se comprometa a garantizar el empleo y la viabilidad del sector y que convoque la Comisión de Seguimiento. Además, piden a Industria un compromiso para el consumo del carbón autóctono, al tiempo que le reclaman que valore las dos propuestas que presentaron para el Plan del Carbón 2013-2018.

Para el secretario de Industrias Extractivas de CC.OO, Juan Carlos Álvarez Liébana, lo fundamental es que «tenemos que encontrar un mecanismo» que permita mantener la actividad del sector y del empleo para negociar un nuevo plan. «Valoramos muy positiva esta reunión porque hemos demostrados que somos capaces de acordar y de buscar y alcanzar alternativas que permitan desbloquear el conflicto, lo que creemos que también va a ser posible con el propio ministerio», ha añadido.

Los puntos claves del acuerdo fueron transmitidos ayer en diversas asambleas a los mineros leoneses. Según el presidente del comité intercentros de Uminsa, Guillermo Sánchez, «todo depende del ministerio, de si son capaces de sentarse a dialogar sobre esta propuesta», que no implica el cese de las movilizaciones en el sector.