Sacyl jubilará a más de 300 médicos en ocho años para rejuvenecer la plantilla

Sacyl planea jubilar a 1.579 médicos en los próximos ocho años (hasta el 2020), de los que aproximadamente 300, el 20%, trabajan en la provincia de León. Los gestores sanitarios justifican esta propuesta, que ha presentado a los sindicatos en las últimos reuniones en Valladolid, en la necesidad de «rejuvenecer» una plantilla que en el caso de León tiene una media de edad entre los 50 y los 60 años. Los representantes de los trabajadores ven con receto esta propuesta y sospechan que los únicos criterios que mueven a la administración son «economicistas». La Junta ha manifestado su intención de reponer al 10% de la plantilla jubilada en la administración, lo que dejará a León con una plantilla con 270 médicos menos. Sin embargo, los representante de los sindicatos UGT, CC.00., Satse y Cesm, consultados por este periódico, recelan de este compromiso ya que en el borrador presentado en la mesa sectorial no se hace referencia a ningún porcentaje de reposición.

La medida está contemplada en el Plan General de Recursos Humanos que Sacyl negocia con los sindicatos.

En los cálculos que Sacyl ha comunicado a los sindicatos se prevé la jubilación 7.450 trabajadores de todas las categorías sanitarias en la Comunidad, el 25% de los 28.788 actuales.

Para conseguir este objetivo, Sacyl hará tabla rasa para la jubilación forzosa a los 65 años — «o la edad de jubilación que corresponda conforme a la normativa vigente»— y limitar la prolongación de la permanencia en servicio activo, que a partir de ahora controlará la Gerencia de Salud, una decisión que los sindicatos ven con recelo. La propuesta es unificar los criterios para la jubilación para el personal estatutario, labor y funcionario.

Recorte de plantilla

El presidente del Colegio de Médicos y sindicato Cesm, José Luis Díaz Villarig, teme que con esta medida «se prescinda de profesionales de mucho prestigio al cumplir los 65 años» y se «reduzca la plantilla».

El representante de sanidad de UGT en León, Faustino Sánchez, sostiene «que esa propuesta es una manera de reducir plantilla porque no garantizan por escrito su reposición».

Jesús Mencía, de CC.OO. califica de «economicista» la propuesta, «suponemos que estos puestos no se cubrirán y lo hacen para ahorrarse dinero».

La portavoz del sindicato Satse, Mar Herrero, vaticina un recorte de plantilla «que perjudicará a la asistencia sanitaria».

La jubilación forzosa del personal sanitario a los 65 años —tal y como establece la ley actual aunque el Gobierno nacional prevé una ampliación— afectará en la Comunidad a 1.579 (el 26%) de los médicos, a 2.213 (el 24%) enfermeras, fisioterapeutas y matronas, 1.732 auxiliares de Enfermería (el 28% de la plantilla) y a 1.926 trabajadores de gestión y servicios (el 23%).

Los gestores sanitarios de la Comunidad limitan la prolongación del servicio activo y se atribuye la potestad para concederlo —hasta ahora se concedía a todos— «para buscar un equilibrio entre la generación de empleo, la necesaria renovación de las plantillas y la estabilidad del mismo, dando lugar a la entrada en el sistema de profesionales jóvenes y con perfiles acordes a los nuevos modelos de gestión asistenciales y organizativos», además de «evitar costes añadidos en el ámbito de Atención Especializada por módulos de actividad sustitutoria y guardias, como consecuencia de la posibilidad de exención de guardias para los especialistas con edad avanzada... y equilibran las cargas asistenciales en función de la demanda».