El monarca no rehúye al presidente catalán, con el que se verá el martes
La cita suele pasar desapercibida, pero el acto de entrega del premio internacional Conde de Barcelona de este año estará lleno de morbo. Y es que, el martes que viene coincidirán en la capital catalana el rey Juan Carlos y el presidente de la Generalitat, justo siete días después de la publicación de la carta de la Casa Real en la que se emplazó a los nacionalistas a no dividir el país ni a perseguir quimeras.
El premio, que distinguirá al secretario de Estado vaticano, cardenal Tarcisio Bertone, lo concede la Fundación Conde de Barcelona, constituida por el diario La Vanguardia en 1986 con el objetivo de impulsar las ciencias y la cultura. Esta entidad impulsada por el conde de Godó, amigo personal del rey, reúne a lo más granado del empresariado catalán y madrileño y trabaja para estrechar lazos entre Cataluña y el resto de España.
El jefe del Estado viajará a Barcelona desde Nueva York, donde asistirá el domingo y el lunes a la reunión anual de la fundación ‘Clinton Global Initiative’. El rey podría haber excusado su asistencia al acto en la capital catalana con el pretexto de su actividad en EE.UU., pero ha decidido verse cara a cara con Mas.
«Una excusa»
El secretario general de CDC, Oriol Pujol, ha replicado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que «ampararse en dinámicas legislativas y constitucionales» denota «la inexistencia de voluntad política» y no es más que «una excusa».
Pujol ha subrayado que CiU está convencida de su «actitud radicalmente democrática».