HABRÁ UNA RESPUESTA "RAZONADA" AL PACTO FISCAL
Rajoy y Artur Mas celebran hoy su esperado encuentro en Moncloa
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, pedirá este jueves al presidente de la Generalitat, Artur Mas, que no provoque más inestabilidad institucional con una convocatoria anticipada de elecciones como respuesta a la negativa del Ejecutivo central ante el Pacto Fiscal que está proponiendo el presidente catalán.
El jefe del Ejecutivo dará una respuesta "razonada" a las demandas del dirigente nacionalista, encabezada por dos hechos: el principio de igualdad de trato que fija la Constitución para todas las CCAA y el hecho de que no hay dinero para configurar ahora ningún otro modelo de financiación. No obstante, Rajoy está dispuesto a tenderle una mano y no se mostrará inflexible a la hora de mejorar el sistema en un futuro, ya que el actual caduca en 2014.
Las fuentes del Gobierno consultadas por Europa Press precisan que la respuesta de Rajoy no diferirá mucho de lo que el presidente del Gobierno ya ha adelantado hoy en el Congreso de los Diputados, durante la sesión de control al Gobierno en la que ha respondido al portavoz adjunto de CiU, Pere Macías.
En esta contestación ha dejado claro que no aceptará el "Concierto" económico que pide CiU y ha recordado que el actual sistema de financiación autonómica fue aprobado por la Generalitat y con el apoyo de CiU. No obstante, Mariano Rajoy ha tendido la mano al afirmar que el sistema de financiación "puede mejorarse" en un futuro. Probablemente en 2014, cuando caduque, como apuntaba esta mañana el ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, quien dejaba claro también que el sistema debe ser igual para todas las CCAA de régimen común.
No hay dinero
Pero Mariano Rajoy tiene claro que este no es el momento, entre otras razones porque, como esgrimen desde el Gobierno, "no hay dinero" para nada y menos para embarcarse ahora en modificar el sistema de financiación de las CCAA.
Por ello, será difícil que Rajoy pueda convencer a Artur Mas con una incierta propuesta, que podría producirse a dos años vista, teniendo en cuenta que la reivindicación del nacionalismo catalán, hace una semana, se acercaba más a la independencia que al pacto fiscal.
No obstante, en este contexto, en el Gobierno recuerdan los "saltos políticos" que ha dado Artur Mas, quien en 2006 fue al notario a firmar su compromiso de que no pactaría con el PP si ganaban las elecciones autonómicas. Unos años después y ante la posibilidad de gobernar sin tener mayoría absoluta, CiU anunciaba que rompía con el notario y dejaba la puerta abierta a acuerdos con los populares, con los que finalmente ha sacado adelante los presupuestos catalanes de los últimos años.
Rajoy pedirá que no genere más inestabilidad
Sin embargo, y previendo la reacción del presidente de la Generalitat, tras la negativa que recibirá este jueves a su propuesta de Pacto Fiscal, el jefe del Ejecutivo adelantaba este miércoles su petición a éste de que "no genere más problemas de inestabilidad política tomando decisiones equivocadas".
Una frase que, según las fuentes consultadas, se refiere al posible adelanto electoral que podría anunciar Artur Mas, después de la manifestación independentista de la Diada. Argumentan que una convocatoria electoral ahora conllevaría un frenazo administrativo y de gestión en Cataluña en un momento en el que el objetivo principal es cumplir con el objetivo de déficit y adoptar todas las medidas necesarias para que éste no se desvíe, teniendo en cuenta que, tanto la UE como los mercados miran ahora con lupa todas las cifras macroeconómicas de España.
Por ello, el Ejecutivo de Mariano Rajoy no ve conveniente en este momento que otros asuntos distraigan del "gran objetivo nacional" que, según reitera una y otra vez el presidente del Gobierno debe ser "crecer y crear empleo".
Le pedira que tenga personalidad para manejar la situación
De hecho, desde la tribuna del Parlamento, Mariano Rajoy le ha advertido a Artur Mas que cuide bien lo que hace y lo que dice y le ha instado a no dejarse "arrastrar" por los acontecimientos, en referencia a la masiva manifestación de la Diada y a su reivindicación independentista. Y este jueves le volverá a pedir que tenga "personalidad" para manejar las cosas, ante situaciones que se le han podido ir de las manos.
Sin embargo, y a pesar de que el presidente del Gobierno recuerda cada vez que tiene ocasión que Cataluña tiene problemas muy serios por el elevado número de parados, y los problemas para cumplir el déficit, el Gobierno no quiere entrar al trapo de la pelea continua por el temor a que esa actitud retroalimente y rearme la postura del nacionalismo catalán.
De hecho, y aunque Mariano Rajoy pueda disponer este jueves de todos los datos y cifras necesarias para responder cumplidamente y razonadamente a Artur Mas, el Gobierno no quiere sacar la artillería de los datos y menos hablar en términos de balanzas fiscales, que es lo que ha esgrimido el Ejecutivo de Artur Mas para reivindicar más financiación.
La última comparación pública del Gobierno que se hizo en estos términos data de julio de 2008, cuando el Gobierno socialista de Zapatero realizó, junto con el Instituto de Estudios Fiscales, un informe sobre las balanzas fiscales, después de las reiteradas demandas de los grupos catalanes.
Este estudio reflejó que la CCAA que más déficit fiscal registraba era Madrid (9,13 por ciento del PIB regional), mientras que Cataluña se movía entre el segundo y el tercer puesto (entre el 8,70 y el 6,38 por ciento), en función de los criterios utilizados, seguida de Baleares (entre el 14,2 y el 7,47). Sin embargo, este estudio se hizo con los datos de 2005 y desde entonces, las cifras han ido cambiando.
Por ejemplo, en estos momentos y desde hace un par de años, las cotizaciones sociales que pagan los trabajadores de Cataluña no son suficientes para cubrir el gasto en pensiones que generan los jubilados catalanes. La propia ministra de Fomento desmentía la semana pasada en el Senado la acusación de CiU de que Cataluña es la CCAA que paga más por los peajes y aportó datos que demostraban que esta región recibe 5 veces más que otras autonomías, ya que en los últimos diez años ha ingresado el 50 por ciento de las subvenciones que da Fomento por este concepto.
Pero, atendiendo al principio de solidaridad que deber regir en el sistema, desde el Gobierno no se quiere entrar en una guerra de cifras.
Por ello, se insiste una y otra vez en que el Ejecutivo no dejará caer a ninguna CCAA y que ayudará a todas como está haciendo a través de los instrumentos que ha puesto en marcha desde que llegó Mariano Rajoy al Gobierno: el plan de apoyo a proveedores; los anticipos del sistema de financiación y su liquidación; la línea ICO para vencimientos y la ampliación a 120 meses de las devoluciones de las liquidaciones del sistema de financiación autonómica correspondientes a los años 2008 y 2009. Unos conceptos que le han supuesto a Cataluña, en lo que va de 2012, disponer de una financiación adicional de 5.656 millones de euros.