Los jueces abren la veda contra la reforma que impulsa Gallardón
Las primeras medidas de presión contra la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial que impulsa Alberto Ruiz-Gallardón ya son efectivas. Algunas jurisdicciones han comenzado a limitar los señalamientos de los juicios semanales para hacer llegar al ministro de Justicia su hastío por la «inasumible» carga de trabajo que soportan y que esta reforma ministerial no afronta.
Así lo revelaron ayerlos jueces decanos tras su reunión con el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Gonzalo Moliner, celebrada en Madrid. El decano de Bilbao, Alfonso González Guija, en nombre de los 15 colegas de las principales ciudades presentes en la cita, aseguró que algunos órganos judiciales ya han comenzado a limitar sus juicios. Justificó esta medisa por el «bien del ciudadano», ya que el «insostenible» número de vistas conlleva una «merma en la calidad de las sentencias, que a veces se convierten en un folio y medio redactado como se puede».
Los jueces decanos criticaron que la anteproyecto de reforma de Gallardón pretende «suprimir» la justicia interina sin la creación de nuevas plazas, por lo que anticipan una mayor sobrecarga de trabajo en los juzgados de la que ya soportan. «A este paso vamos hacia una autorregulación» a la hora de programar los señalamientos, advirtió González Guija.
Permisos
Los decanos también trasmitieron a Moliner su malestar por otra aspecto de la reforma ministerial, en referencia a los retoques del estatuto orgánico, que limita de 18 a tres días los permisos de los miembros de la Carrera Judicial. Más si cabe, afirman, «porque no conlleva gasto ni coste económico para el ciudadano».
A todos ellos Moliner les transmitió su intención de actuar de puente con el ministro Gallardón, habida cuenta del monumental enfado de los togados, que en pocos meses han visto cómo les rebajaban el sueldo y les tocan derechos de su estatuto profesional.
En este marco, Gallardón y su ‘número dos’, Fernando Román, se reúnen hoy con los representantes de las asociaciones de jueces y fiscales para que puedan exponerle su postura sobre la reformas.
La cita se prevé tensa, después de que las juntas de jueces celebradas el pasado 21 de septiembre acordaran convocar concentraciones y otras medidas de protesta si en un plazo de 15 días el ministro no accedía a negociar su proyecto de reformas.