Expediente por protestar frente al Congreso
. La Delegación del Gobierno de Madrid expedienta a 50 personas por la convocatoria promovida por la coordinadora 25S en las inmediaciones de la Cámara Alta.
La Delegación del Gobierno de Madrid abrióayer expedientes sancionadores a 50 personas que fueron identificadas por la Policía horas antes de celebrarse la convocatoria ‘Rodea el Congreso’, promovida por la coordinadora 25S y que no fue comunicada a las autoridades.
Fuentes del órgano dirigido por Cristina Cifuentes aseguraron que seguirán abriendo procesos administrativos a las personas que acudan a la manifestación convocada este sábado en la plaza de Neptuno, en las inmediaciones del hemiciclo, si esta no es comunicada a la Delegación. Estos expedientes rondarían los 300 euros de multa si adquieren firmeza.
La propia Cifuentes explicó ayer que la concentración era «ilegal» y que los agentes seguirán actuando contra las personas que convoquen o promuevan otro acto sin autorización de su departamento.
Cabe recordar que la postura opuesta, es decir, la convocatoria de la manifestación del 25 de septiembre por parte de un particular, concluyó con un expediente por una falta grave por no garantizar la seguridad de la concentración y desobedecer a la Policía. Este proceso acarrearía una multa de hasta 6.000 euros.
Dos versiones
Desde la Delegación manifestaron que los propios agentes comunicaron personalmente a los primeros manifestantes concentrados en la Cuesta de Moyano, próxima la plaza de Neptuno, que la marcha no tenía autorización y que si continuaban con la protesta serían sancionados. Esto ocurrió sobre las 17:30 horas y el acto ‘Rodea el Congreso’ comenzó tres horas más tarde.
La versión, sin embargo, difiere desde la coordinadora 25S. Dijeron que los denunciados eran personas ajenas a la protesta, incluso alguna salía del metro de Atocha, próximo a la cuesta de Moyano, y ni siquiera iban a la manifestación. El colectivo enmarca estos expedientes en la «estrategia de criminalización» de la delegada Cifuentes. Con ello, aseguran, busca «figurar» y que al día siguiente se hable de ella y no del carácter pacífico de la convocatoria, que concluyó sin heridos ni detenidos.