La UPL abandonó la sala tras una polémica por las intervenciones
El Pleno se cerró sin los dos concejales de la UPL sentados en su sillón. El puesto que abandonaron justo antes de la aprobación del presupuesto, que habían adelantado que votarían en contra, después de una discusión con el alcalde por los turnos de intervención de cada uno de los grupos políticos. Una polémica que terminó con Chamorro casi por los suelos, al tropezar con el cable de una cámara, ante lo cual el regidor del PP atacó al leonesista: «Abandonen, pero sin títeres», solicitó.
El problema surgió con la intervención del portavoz del PP, López Benito, después de que hubiera hablado dos veces su compañero Agustín Rajoy. Una situación que Chamorro intentó advertir como una cuestión de orden al alcalde, quien le negó la palabra a pesar de su derecho reconocido en el Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Corporaciones Locales (ROF). Una normativa de acuerdo a la cual, como explicó después el leonesista, en sus trece años en la corporación «los debates se han desarrollado de una manera similar: dos intervenciones por cada uno de los grupos y, para finalizar, si así lo desea, una del alcalde.
Por contra, el portavoz del PP se ajustó al ROF para citar que cabe una primera exposición del punto —que siempre se ha entendido como la lectura de la secretaria— y luego dos por grupo, tras lo cual «el alcalde o presidente puede dar por terminada la discusión que se cerrará con una intervención del ponente en la que brevemente ratificará o modificará su propuesta». La UPL apuntó que esta cuestión haría que el equipo de gobierno contara con 5 intervenciones y el resto 2, por lo cual pidió que se regule de manera clara a partir de ahora y no «al arbitrio del alcalde».