Una 'revelación' con muchas opciones de entrar en la Cámara

Son la fuerza revelación de la campaña. Después de curtirse durante dos décadas en la política municipal, la Candidatura d'Unitat Popular (CUP) decidió el 8 de octubre (13 días después de que Artur Mas anunciara el adelanto de los comicios) concurrir por primera vez a unas elecciones al Parlament, empujada por la grave crisis y el auge del soberanismo. De ideología marxista, carácter asambleario y firmes defensores de los Països Catalans (Cataluña, Comunidad Valenciana y Baleares), son lo opuesto a un partido político tradicional y así lo han demostrado durante estos 15 días, con actos en pequeños espacios y alejados de los focos. Aun así, llenaron el Barcelona Teatre Musical el pasado domingo, un día después de que hiciera lo propio ERC.

En un primer momento, su cabeza de lista, David Fernàndez, se mostraba confiado en lograr representación, un diputado o dos, extrapolando los resultados obtenidos en las pasadas municipales. Pero las últimas encuestas le otorgan hasta cinco escaños y Fernàndez ya habla de tener un grupo parlamentario para llevar la «voz de las clases populares» a la Cámara y plantar cara «a aquellos que recortan y privatizan en nombre de Cataluña».