«El de Villafranca es rentable», afirma Amigo, del comité
Los 29 trabajadores del parador de Villafranca recibieron como un mazazo la propuesta de cierre de cinco meses, el despido de cuatro trabajadores y el pase a fijos discontinuos del resto de plantilla. «Estamos muy afectados, no nos esperábamos esto; podría ser algún ajuste, pero no cinco meses, no tanto tiempo», indicaba ayer Javier Amigo, delegado sindical en el parador villafranquino.
El representante sindical afirmaba que estas instalaciones reestrenadas en el 2011 «son rentables» y reseñaba que, aunque es cierto que por la crisis económica se ha producido una merma, no es tanta como para aplicar este ERE. En principio, el 20 de este mes tendrían que ir de vacaciones y volver abrir el parador el 1 de febrero.