'El Gordo', 76.058, deja 400.000 euros en La Robla
La librería de la Avenida Ramón y Cajal 67 vende, a través de máquina electrónica, un décimo del primer premio
Un décimo del 76.058, vendido en la librería de la Avenida Ramón y Cajal 67 de La Robla a través de máquina electrónica, deja 400.000 euros en León. El Gordo fue el primer premio del sorteo de Navidad, que salió a las 10.07 y está muy repartido por todo el país.
Varios décimos del Gordo del Sorteo Extraordinario de Lotería de Navidad, el 76.058, premiado con 400.000 euros al décimo, han sido vendidos en Fuentepelayo (Segovia), El Burgo de Osma (Soria), Burgos, Salamanca y Valladolid, Olmedo (Valladolid), La Robla y Aranda de Duero (Burgos).
En concreto, este número se ha distribuido en la Administración número 2 de El Burgo de Osma (Soria), que ha repartido cuatro millones de euros al vender una serie completa, las administraciones de Burgos ubicadas en las calles San Pedro Cardeña, 4, y Molino Salinas, 1, 'La Toquilla', de Salamanca, la número 2 de Olmedo (Valladolid), así como en despachos receptores de Aranda de Duero, Valladolid, La Robla, y Fuentepelayo (Segovia). En algunos de estos casos, únicamente se ha vendido a través de terminal un solo décimo.
El propietario de la Administración ubicada en la calle Molino Salinas de Burgos, Valentín García, aseguró que no puede concretar cuántos décimos ha vendido del Gordo porque, probablemente, se repartió a través de terminal y es muy díficil concretar. No obstante, se mostró «muy contento» por saber que algo ha repartido del principal premio del Sorteo Extraordinario de Navidad.
Por su parte, Ana Isabel Álvarez, empleada de la Administración 'La Toquilla' de Salamanca, propiedad de Nieves Hernández Nistal, no sabe tampoco “cuantos ni a quien, porque todo ha sido por terminal». “Lo ideal sería que hubiera caído en el barrio, el de Puente Ladrillo, que es obrero», comentó la trabajadora, quien añadió: “Me tiemblan hasta las piernas. Me dieron la noticia por la radio y cuando me lo dijeron veía hasta doble. Es una sensación extrañísima porque nunca hemos dado un premio de este calado, solo una primitiva hace tiempo».
En la misma situación se encuentra Javier del Pozo, que ha vendido un solo décimo desde su terminal de la calle Embajadores de Valladolid, lo que se traduce en 400.000 euros. «A buen seguro que no es una peña, será alguien a título individual», dijo.