Silván garantiza servicios alternativos ante la reducción de las frecuencias
Pasajeros esperan la llegada de un tren en la estación de León.
El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, remarcó ayer que los objetivos que la Junta trasladó al Gobierno de cara a la reunión del Consejo de Ministros para tratar la reordenación ferroviaria de España, fueron que «no se suprimieran ninguna línea en la Comunidad y en los casos en los que la reducción de frecuencias fuese necesaria ésta se solucione con otras medidas para garantizar el servicio a la población.
El consejero adelantó que ambas pretensiones «ya están conseguidas». En cuanto a la disminución de las frecuencias ferroviarias, el consejero explicó que la decisión, «viene motivada por cuestiones de eficiencia económica. Hay líneas en las que resulta imposible mantener ciertas estaciones en estos momentos, aunque esta disminución se solucionará con trenes de larga distancia o servicio por carretera para asegurar en todo caso la movilidad de los usuarios». Para ejemplificar este ajuste, el consejero destacó que «a lo que a un usuario le cuesta 8 ó 9 euros, al erario público le supone cerca de 235 y hay paradas frecuentadas, en ocasiones, por un único usuario».
Silván además matizó que «en el caso de la Comunidad se mantendrán todas las líneas ferroviarias» e insistió en el objetivo de la Junta de que no se cierre ningún corredor, «porque esos ya no se vuelven a abrir». En este caso, el consejero aludió a la supresión del servicio en la Vía de la Plata en 1984. «Me consta que aún pasará muchísimo tiempo hasta que se vuelva reabrir y prestar servicio».