Rajoy habla mañana de los supuestos sueldos B, que ya investiga el fiscal

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, hablará mañana públicamente, por primera vez, de las informaciones que apuntan que cobró, con otros dirigentes del PP, supuestos pagos ajenos a la contabilidad oficial del partido, un asunto que ya ha empezado a investigar la Fiscalía Anticorrupción.

Ha sido la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saénz de Santamaría, la que ha anunciado la intención de Rajoy de dar mañana su opinión sobre lo que se ha publicado, en una comparecencia que podrán seguir «todos los ciudadanos».

Rajoy preside mañana una reunión extraordinaria del Comité Ejecutivo Nacional del PP que convocó ayer tras publicarse en El País los «papeles de Bárcenas», la supuesta contabilidad manuscrita del extesorero del partido imputado en el caso Gürtel con pagos, entre otros, a Rajoy, María Dolores de Cospedal, Javier Arenas, Francisco Álvarez Cascos o Rodrigo Rato.

Aún no han aclarado en el PP si Rajoy comparecerá con un discurso en abierto ante la dirección de su partido o se someterá a las preguntas de los medios de comunicación en una rueda de prensa.

A un día de esta cita de la cúpula y los barones regionales del PP -la segunda en menos quince días-, la Fiscalía Anticorrupción ha anunciado la apertura de una investigación propia sobre «la posible existencia de una caja B» en el partido.

No obstante, Anticorrupción no ve por el momento «indicios que permitan vincular» las cuentas en Suiza descubiertas a Bárcenas con esa supuesta contabilidad opaca de los populares.

Mientras el PP se prepara para el Comité Ejecutivo Nacional, en el que también se podrían dar más detalles de la auditoría interna del partido, algunos dirigentes han reiterado hoy su defensa a la honorabilidad de Rajoy, a la que se ha sumado la vicepresidenta del Gobierno.

Sáenz de Santamaría ha subrayado la «conducta ejemplar» de Mariano Rajoy y ha asegurado que en los doce años que lleva trabajando con él tanto en el Gobierno como en la oposición, «nunca» le ha visto «saltarse una norma» y el jefe del Ejecutivo «siempre ha llevado una vida recta y al servicio de los ciudadanos».

Además, los populares siguen poniendo en duda la veracidad de los «papeles» de Bárcenas.

Preguntada por esos documentos, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha insistido en que «francamente, en algunas de sus partes», no da a los papeles «ninguna, ninguna, ninguna credibilidad».

Mientras, el vicesecretario general de Estudios y Programas, Esteban González Pons, ha subrayado que estos documentos «hasta pueden ser de Bárcenas», pero «no son la contabilidad del PP».

Tanto Cospedal como el vicesecretario general de Política Autonómica y Local, Javier Arenas, han confirmado hoy que ya preparan sus acciones legales individuales contra estas informaciones, mientras que el expresidente del Gobierno José María Aznar ha presentado hoy mismo en los juzgados de Pozuelo (Madrid) una demanda contra El País.

Desde la oposición, unos y otros siguen subrayando que si se demuestra que Rajoy cobró sueldos B tendrá que dimitir.

Así lo cree el PSOE, que además pedirá al Tribunal de Cuentas una revisión extraordinaria de las cuentas del PP ante las informaciones sobre la supuesta contabilidad B de Bárcenas, según ha anunciado su «número tres», Óscar López.

Por su parte, el coordinador general de IU, Cayo Lara, ha acusado al Gobierno de estar propiciando un «estallido social» con su «posición de avestruz» en el «caso Bárcenas», y también ha considerado que «cada día está más cerca« el momento en que el jefe del Ejecutivo dimita y convoque elecciones.

Todo en un día en el que el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha descartado que el «caso Bárcenas» pueda tener ningún «impacto importante» en la percepción de la credibilidad de la economía española, ya que «lo que preocupa a los mercados es la política económica del Gobierno».

«Si usted mira el mercado más profundo y sensible a este tipo de cuestiones, el mercado de bonos, ayer y hoy lo que ha habido es una reducción de la prima de riesgo», ha asegurado De Guindos.

Además ha insistido en que ningún responsable europeo le ha planteado «ninguna duda» desde que arreciasen estas informaciones.