Julián Simón con el mensaje y con su jefe
Lo intentó con ahínco desde primera hora de la mañana. Julián Simón no fue capaz de convencer a Folgueral para que se sometiera a la maniobra ideada por Julio Villarrubia. Folgueral se mostró serio y contundente. Su rostro contrasta con el de Villarrubia, que con gesto contrariado encara las escaleras de la sede de UGT en Ponferrada escoltado por Simón. Y eso que todavía no habían sido abucheados por sus propios militantes.