El secretario de las infantas metió en Nóos a Urdangarín y a la hija del Rey
Un correo revela que Torres consultó a García-Revenga sobre cómo fundar el ente.
El pasado 23 de febrero, Carlos García Revenga lo negó todo ante el juez. El secretario de las infantas insistió una y otra vez en sacudirse cualquier responsabilidad en el Instituto Nóos, del que era tesorero.
Balones fuera, incluso a costa de señalar a Iñaki Urdangarín como único responsable, junto a Diego Torres, de lo que ocurría en la fundación sin ánimo de lucro. Durante horas insistió en que él entró a la junta directiva del Instituto Nóos por hacer un favor a Urdangarín y por deferencia a la infanta Cristina. Es más, que él estaba de manera simbólica, de forma casi accidental. Pero las pruebas dicen otra cosa.
Un correo hasta ahora inédito, aportado hace unos días a la causa por Manuel González Peeters, letrado de Torres, devela que el ‘asesor de la Casa de Su Majestad el Rey’, como reclama que le llamen, tuvo un papel cuanto menos decisivo en la operación que tuvo lugar en el 2003 para convertir la desconocida y moribunda Asociación Instituto de Investigación Aplicada de Diego Torres en el brillante Instituto Nóos presidido por el yerno del Rey, el organismo que terminó ingresando más de seis millones de euros de dinero público tras el parapeto de una fundación. Un mensaje que evidencia que también supervisó la entrada en la junta de ese nuevo instituto de Urdangarín, Cristina de Borbón y de él mismo.
El matrimonio, en Noos
Ese mail, de título ‘Estatutos Instituto de Investigación Aplicada’ y que lleva dos archivos adjuntos con detalles del nuevo ente, está fechado el 25 de septiembre del 2003 y está dirigido por Torres desde Nóos Consultoría Estratégica a la dirección electrónica personal de García Revenga en la Zarzuela. En ese correo, el ex socio de Urdangarín le comunica la nueva estructura de Nóos con la incorporación del matrimonio real y del asesor de la Casa del Rey.
Torres también le anuncia la nueva composición de la dirección del instituto, que a partir de ese momento pasaba a ser una suerte de fundación sin teórico ánimo de lucro, con las correspondientes ventajas fiscales y el trato de favor ante las instituciones.
«Te envío el borrador de acta en la que se modifican los estatutos para adaptarlos a la nueva actividad, para que los conozcas», explica Torres a García Revenga, al tiempo que pide su «opinión» sobre los documentos que daban carta de naturaleza al nuevo organismo.
«(El acta) todavía es provisional, pero si no descubrimos algún problema lo tramitaremos en un par de días», avisa el ex ocio del duque al alto cargo de la Zarzuela.
«La junta directiva se cambiará una vez estén aprobados estos nuevos estatutos», anticipa Torres, quien se despide con un «muchas gracias por tu ayuda».
Salida de la otra junta
La respuesta de García Revenga se desconoce, pero el asesor de la Casa del Rey debió dar su visto bueno a todos porque casi de manera simultánea a este mail nació oficialmente Nóos en septiembre del 2003.
Según las actas del sumario, tras el correo al secretario de las infantas abandonaron de inmediato la junta directiva del instituto su presidente, Marco Antonio Tejeiro, cuñado de Torres, y su tesorera, Ana Tejeiro, esposa de Torres, y entró como presidente Urdangarín, como vicepresidente Torres, como tesorero García Revenga, como vocal Cristina de Borbón y como secretario Miguel Tejeiro, otro de los cuñados de Torres. Esa directiva siguió inalterada hasta el 2006, cuando la Zarzuela recomendó a los duques abandonar Nóos, por entonces ya en el punto de mira por sus negocios con los gobiernos de Baleares y la Comunidad Valenciana.
Este mail inédito es el primero que se conoce dirigido por Torres a García Revenga. También es el primero en el que se constata que el secretario de las infantas intervino en la creación de Nóos, pero no es el primero que apunta a que el ya imputado estaba en el día a día del instituto bajo sospecha.