Cerrar

El cerco al Congreso acaba en una batalla campal por el centro de Madrid

Poco más de 3.000 personas acudieron a la convocatoria de la Plataforma ‘¡En Pie!’.

Efectivos de la Policía Nacional protegen los accesos al Congreso de los Diputados durante la protesta.

Publicado por
m. saíz-pardo | (colpisa) madrid

Creado:

Actualizado:

Al final no fueron más de 3.000 personas, pero lograron paralizar el centro de Madrid y convertir el corazón de la ciudad en un campo de batalla donde los adoquines y las piedras volaban por encima de los techos de centenares de coches atrapados entre los antidisturbios y los manifestantes.

La convocatoria para tomar el Congreso de la Plataforma ‘¡En Pie!, la más radical de toda la galaxia de indignados, terminó con incidentes, carreras y el centro de la urbe colapsado por la insistencia de diferentes grupos de violentos, el núcleo más duro de la protesta, que se afanaron en enfrentarse con unos antidisturbios que les triplicaban en número en cada escaramuza.

A diferencia de las grandes protestas de Democracia Real o del 15M, que se desmarcaron de esta concentración por su postulados no pacifístas, los grupúsculos antisistema y anarquistas llevaron la voz cantante desde el inicio, tal y como había avisado el Ministerio del Interior y la Delegación del Gobierno, que habían hecho llamamientos a la población para que no secundaran esta marcha no autorizada para la que los convocantes habían distribuido manuales de guerrilla urbana.

Apenas hubo cánticos o pancartas reivindicativas. Los tradicionales gritos indignados de «¡no nos representan!» fueron sustituidos por continuos insultos a los 1.400 antidisturbios que convirtieron el Congreso de los Diputados en un bunker inexpugnable. El despliegue policial para evitar que los manifestantes cumplieran su promesa de «tomar el castillo abandonado», como llamaron al Parlamento, fue incluso mayor que el pasado septiembre cuando fueron varias decenas de miles los manifestantes que se dieron cita en la Plaza de Neptuno, convertida hoy, otro día más, en el epicentro de las protestas contra los políticos y los recortes. El control de las fuerzas de seguridad fue exhaustivo en todo el eje del paseo de la Castellana, que estuvo cortado durante buena parte de la tarde.

Al cierre de esta crónica, los detenidos eran cinco, aunque solo uno en las cargas. Los otros cuatro fueron arrestados durante los controles preventivos, cuando fueron interceptados con mochilas cargadas de rodamientos, petardos o armas blancas.

Cargando contenidos...