El BBVA coincide con el FMI en que debe profundizarse en la reforma laboral

El jefe de estudios de BBVA, Jorge Sicilia, ha coincidido hoy con el FMI en que España debe profundizar en la reforma laboral, en particular en lo que se refiere a reducir la dualidad del mercado de trabajo a través de una rebaja de las indemnizaciones por despido de los contratados indefinidos.

En una mesa redonda durante el seminario que organiza la Asociación de Periodistas de Información Económica (Apie) en Santander, patrocinado por BBVA, Sicilia ha defendido que la dualidad conlleva que la cantidad de contratos temporales en nuestro país sea demasiado alta.

También se ha referido a la propuesta de moderación salarial promovida a través de un acuerdo social entre patronal y sindicatos.

A su juicio, es necesaria una "devaluación competitiva" en la que las negociaciones salariales se hagan en función de la productividad de cada empresa o sector, y no al margen de ella.

"No se trata de hacer una rebaja de salarios", ha defendido, sino de establecer dicho vínculo.

A juicio del economista José Carlos Díez, que también ha participado en la mesa, una bajada de salarios resultaría negativa para el consumo interno y ha defendido la alternativa de la devaluación monetaria.

En su opinión, todas las crisis se han solucionado con deflación y monetización, y nunca se ha salido de una situación como la actual a través de una bajada de salarios.

El catedrático de la Universidad de Oviedo Esteban García Canal ha considerado que la legislación laboral en España es "demasiado rígida", por lo que se debe culminar su reforma, aunque ha recordado que cualquier bajada de salarios tendrá un efecto indeseable en el consumo.

Al margen, el analista económico Juan Ignacio Crespo, ha considerado que el porcentaje de jóvenes desempleados en España en relación con el resto de los grupos de edad es uno de los más bajos de Europa, ya que en su mayoría están estudiando.

Según sus cálculos, si se elimina a los estudiantes de las tasas de desempleo quedaría un ratio de parados del 20 %, frente al 50 % que aparece en la Encuesta de Población Activa (EPA).