El conductor del Alvia no consumió alcohol ni drogas antes del siniestro
El instructor encargará un análisis pericial independiente sobre las causas del suceso.
Agentes de la policía científica investigaban y recogían datos ayer en los vagones.
Un informe elaborado por el Instituto Nacional de Toxicología confirmó ayer que Francisco José Garzón, el conductor del Alvia que descarriló el 24 de julio en las afueras de Santiago, no había consumido ni alcohol ni drogas de ninguna clase en las horas previas al siniestro en el que murieron 79 personas y 150 más resultaron heridas.
Los análisis toxicológicos lo único que detectaron fue la ingestión de café, ya que en las muestras había cafeína, según la información facilitada por un portavoz del Tribunal Superior de Justicia de Galicia.
El juez instructor del caso, Luis Aláez, ha emplazado a los colegios de ingenieros de Caminos, Industriales y de Telecomunicaciones a que le propongan el nombre de un especialista de cada disciplina para la elaboración de un informe pericial independiente que determine los factores del descarrilamiento, las circunstancias en que se produjo y las posibles anomalías, deficiencias e irregularidades que pudiesen guardar relación con el siniestro.
El magistrado pide a los colegios, que si es posible, le recomienden especialistas que tengan conocimientos específicos en infraestructuras, material rodante y comunicaciones ferroviarias.
Vía libre
El auto por el que Aláez ordena la diligencia faculta a los futuros expertos judiciales a acceder a toda la información obrante en la causa, a demandar los datos y documentación que precisen de Renfe, Adif o el Ministerio de Fomento, a acceder al lugar del siniestro, a analizar los restos del convoy, a entrevistarse con personal ferroviario y testigos, y a acceder a los equipos de registro y grabación de los centros de control o al sistema de señalización.
Además de esta pericial independiente, Aláez tiene previsto unir a las diligencias del caso, en cuanto le sean entregados, los informes de parte de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios, y los que elaboren Renfe y Adif.
Agentes de la Policía con la ayuda de dos perros buscaban ayer entre los vagones siniestrados, depositados en una nave de Padrón (La Coruña), la existencia de restos humanos u otros objetos de importancia para la investigación.
Los heridos ingresados han bajado a 41 y la única menor que permanecía en la UCI ya está en una habitación de planta.
La cifra de heridos que permanecen ingresados en hospitales gallegos tras el accidente de tren registrado el pasado 24 de julio en Santiago descendió a 41 este martes, de los que siete están en estado crítico (uno menos que este lunes, al haber sido trasladado a planta el único menor que continuaba en la unidad de críticos).
De este modo, la cifra de hospitalizados en centros gallegos se reduce tras recibir el alta cinco pacientes desde el lunes, según han informado a Europa Press fuentes de la Consejería de Sanidad. En concreto, Sanidad ha puntualizado que los siete hospitalizados en estado crítico se encuentran en el Complexo Hospitalario Universitario de Santiago.