Mas niega una marcha atrás en la consulta pero suaviza su relación con Rajoy

El presidente catalán, Artur Mas, ha negado que dé marcha atrás "ni un milímetro" en su idea de celebrar una consulta en Cataluña en 2014 porque la hará "sí o sí", mientras que su reunión del pasado 29 de agosto con Mariano Rajoy, conocida hoy, le permite suavizar una relación que el Gobierno enmarca en el diálogo y la legalidad.

Después de que ayer Mas agitase el debate soberanista al plantear unas elecciones plebiscitarias en 2016 si el Estado impide una consulta de autodeterminación en 2014, el president ha asegurado hoy ante el líder de ERC, Oriol Junqueras, que "no hay ni un milímetro de marcha atrás, ni tan sólo de freno" porque "la consulta se hará" en 2014.

Mas ha visitado a primera hora de esta mañana el Ayuntamiento de Sant Vicenç dels Horts (Barcelona), cuyo alcalde es el presidente de ERC, Oriol Junqueras, formación que da estabilidad parlamentaria a una CiU que gobierna en minoría y con la que ha pactado a cambio la celebración de un referendo de autodeterminación en 2014.

Junqueras y Mas se han encajado las manos ante la fachada del ayuntamiento en un ambiente enrarecido por la tensión que sus palabras de ayer generaron en las filas de ERC a pocos días de la celebración de la Diada, y Mas, ante los clics de las cámaras, le ha comentado en voz baja: "Tenemos un poco de ruido ambiental...".

En sus respectivos discursos, Junqueras ha afirmado que la sociedad catalana "siempre ha encontrado la manera de hacerse escuchar" y, ante Mas, ha advertido: "Todos sabremos escuchar el clamor de la sociedad en el ámbito de la reivindicación nacional".

En este contexto ha trascendido que Mas se reunió en secreto con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el pasado 29 de agosto en la Moncloa, según ha avanzado hoy el diario Ara.

Mas viajó en coche el jueves de la semana pasada, tal como hizo en otras ocasiones, para sondear la disposición del Gobierno a avalar el ejercicio del derecho a decidir.

El presidente catalán ha confirmado públicamente contactos "públicos y privados" con el presidente del Gobierno, con el que se ha telefoneado en más de una ocasión en las últimas semanas, según fuentes nacionalistas consultadas por Efe.

En rueda de prensa al concluir la cumbre del G-20 en San Petersburgo, Rajoy no ha querido dar detalles de sus contactos con Mas y ha afirmado, sobre su conversación de la semana pasada, que "hablar nunca es malo ni sobra, sin perjuicio de que todo el mundo defienda sus propias posiciones".

Rajoy ha recordado que habla con Mas y otros presidentes autonómicos con "cierta periodicidad", pero lo ha enmarcado en un ámbito de conversación de carácter privado.

Ha reconocido asimismo que la cuestión catalana es un asunto "importante para los ciudadanos de España y de Cataluña".

Sin embargo, ha destacado que lo importante no es la reunión sino que "todos trabajemos por un proyecto común y objetivos compartidos" para que "España sea capaz, tirando todos juntos", de aprovechar los retos y oportunidades.

Rajoy ha aludido a San Petersburgo como "ciudad de puentes" y ha sentenciado que "hablar nunca es malo ni sobra sin perjuicio de que todo el mundo defienda sus posiciones".

Casi en paralelo, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha afirmado tras el Consejo de Ministros que el Gobierno valora positivamente cualquier iniciativa que cumpla la ley.

La vicepresidenta ha recordado que el Gobierno mantiene un diálogo y lealtad institucional con todas administraciones, y especialmente con Cataluña, buscando la máxima lealtad institucional dentro del respeto a la Constitución y a las leyes.

Sobre la convocatoria de elecciones plebiscitarias en 2016, la vicepresidenta ha dicho que la obligación del Ejecutivo es servir al interés general de todos los españoles, vivan donde vivan.

Por su parte, la presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, ha pedido a Mas que deje de "engañar a todos" para contentar a todo el mundo y "rectifique de verdad" su plan.

Según fuentes del PPC consultadas por Efe, Sánchez-Camacho habló este verano con Rajoy para favorecer el diálogo con la Generalitat, a la espera de una carta de respuesta al presidente catalán sobre su petición de consulta que, según dichas fuentes, irá en el sentido de abrir puertas a escenarios que se puedan realizar, como una nueva financiación, y siempre en el marco político constitucional.

Por su lado, el líder del PSC, Pere Navarro, ha acusado a Mas de cambiar de opinión en un solo día por las presiones del presidente de ERC, mientras que el líder de Ciutadans, Albert Rivera, cree que un referéndum "no es bueno" para Cataluña porque pretende diferenciar a los catalanes entre "buenos y malos".