Un recorrido por media provincia con todas las obras por concluir
Nuevo trazado del AVE en Puente de Alba.
El recorrido del AVE leonés tiene demasiados puntos de abandono desde hace casi tres años. Tantos como puentes, viaductos y túneles se pueden recorrer desde La Pola de Gordón a Sahagún. La carretera nacional 630, primero, y después la autovía a Burgos son un camino plagado de nuevas infraestructuras a punto de concluir, o concluidas ya, pero sin presupuesto para rematarlas. Y menos aún para ponerlas en funcionamiento. En la línea hasta Palencia desde León apenas se ven trabajadores, por no decir ninguno.
Las respuestas parlamentarias, especialmente al diputado socialista asturiano Antonio Trevín, se han convertido en un termómetro del grado de presión para que, de una vez, arranquen las obras. Tanto desde Palencia a León, como en la Variante de Pajares, donde la polémica también está servida ya que se abrirá con ancho ibérico, pese a estar ideada desde el inicio para el ancho internacional que utilizan los trenes de alta velocidad.
Todavía el pasado mes de junio, el secretario general de Infraestructuras, Manuel Niño, señaló que, aunque comenzará funcionando con ancho de vía ibérico por un sólo túnel, se podrá adaptar de forma «rápida y sencilla» al ancho de vía internacional en cuanto finalicen las obras de conexión con el resto de la red de alta velocidad.
«En una primera fase la Variante de Pajares entrará en servicio en ancho ibérico y estará dotada de una traviesa polivalente apta para los dos anchos de vías», aseguró Niño durante su comparecencia en la Comisión de Fomento del Congreso y en respuesta a Trevín.
El alto cargo ministerial reiteró también el «compromiso firme» del Gobierno de terminar «en el menor plazo posible la Variante de Pajares para que «los ciudadanos de Asturias y del norte de España puedan ver cómo el AVE es una realidad», al tiempo que aseguró que ya se han ejecutado más del 98% de las obras de plataformas. El mismo porcentaje que de Palencia a León, también en vía muerta.
Las obras del AVE reflejan el estado de una infraestructura víctima de los recortes. Hasta ahora, la sociedad leonesa reivindicaba infraestructuras que nunca llegaban; ahora el problema es que las que están a punto de acabar no se terminan, aunque estén al 98%.