Los duques de Palma endosaron a Aizoon un avión para ir a esquiar
El vuelo a una estación de lujo costó 5.500 euros y parte se pagó con dinero público.
Los ‘emails’ recuperados de los servidores del Instituto Nóos revelan nuevas irregularidades fiscales de Iñaki Urdangarín y Cristina de Borbón. Según esos correos electrónicos, a los que ha tenido acceso Colpisa, los duques endosaron en 2010 a Aizoon como gasto de empresa el flete por 5.500 euros de un avión privado para irse a esquiar a uno de las estaciones invernales más exclusivas de Estados Unidos con todos su familia. Pero hay más, pidieron facturas a nombre de Aizoon de los pasajes de los tres escoltas que los acompañaron a las pistas de Colorado. Billetes que, en realidad, corrieron a cuenta de las arcas públicas.
El cruce de correos electrónicos que ha descubierto este supuesto doble fraude al fisco tiene como protagonistas a la secretaria de Urdangarín, Julita Cuquerella, y al director de ventas de la compañía aérea ‘FlightOne’, Michael Gardner. Esos mensajes, todos en inglés, se han recuperado de los servidores de Nóos porque estaba en copia el contable de la trama y de los duques, Marco Tejeiro.
Cuquerella, cuya dirección de ‘email’ es corporativa de Telefónica y que se presenta como miembro de la Secretaría de la Comisión de Asuntos Públicos de la multinacional para la que entonces trabaja el yerno del rey en Washington, gestionó, sin embargo, el viaje privado de la infanta y Urdangarín. Se trata del flete de un avión para un vuelo de ida y vuelta desde Denver, en Colorado, a la prestigiosa estación de esquí de Telluride, en las Montañas Rocosas, también en Colorado, los días 13 y 20 de febrero de 2010.
En detalle
Los pasajeros de tan exclusivo vuelo fueron Cristina de Borbón, Iñaki Urdangarín, sus hijos Juan, Pablo, Miguel e Irene, y los tres escoltas de la familia, a sueldo del Ministerio del Interior. Todos ellos en esa época viven en Washington. El coste final del vuelo, según los correos, es de 7.256,25 dólares, unos 5.500 euros al cambio de la época. 6.826,25 euros corresponden al alquiler de la aeronave, al que hay que sumar 430 dólares más porque los duques reclamaron un segundo piloto en el vuelo de vuelta.
Las irregularidades fiscales las revelan las órdenes de cobro que da Cuquerella a Gardner en un correo electrónico fechado el 11 de febrero de 2010, después de que el director de ventas le preguntara cómo iba a abonar el viaje. «Michael, cobra el importe completo a la tarjeta de crédito (de Aizoon, cuyo número de tarjeta y CIF ya le ha pasado en un correo dos días antes)», explica la mujer de confianza de Urdangarín. «Si es posible necesito una factura de todo ello a nombre de Aizoon SL, sobre la que creo ya te envié los detalles por correo electrónico», apunta Cuquerella. «También necesito para el policía un ticket de caja sencillo solo por un tercio del total», precisa la secretaria del duque, que pide que no se le haga factura al funcionario.
«No hay necesidad de poner el nombre de la empresa, sólo el de Javier XXXX. Ese [ticket, nunca factura] se lo puedes dar a él, es el inspector de policía», señalaba Cuquerella en sus instrucciones.