Fabra dice que no habrá vuelta atrás en el cierre de la televisión valenciana

«Hoy he venido a hablar de motos. Pregúntenme sobre motos». El presidente de la Generalitat valenciana mostró así su malestar por las preguntas sobre su orden de cerrar la Radio Televisión Valenciana. Alberto Fabra acudió ayer al Gran Premio de la Comunidad Valenciana de motos, su primera comparecencia en público tras la decisión de clausurar el ente público, y evitó comentar la medida. Solo dijo que «la decisión ya está tomada, lo hemos dicho por activa y por pasiva», y a cuanta pregunta sobre el cierre o las manifestaciones de protesta del sábado su respuesta fue invariable, quería hablar de motos y de nada más.

Las concentraciones de protesta por el cierre de la RTVV en las tres capitales de la comunidad fueron, en cambio, muy celebradas por la oposición. El líder de los socialistas valenciano, Ximo Puig, indicó que las manifestaciones mostraron «el sentimiento del pueblo» ante la medida del Gobierno del PP e instó a Fabra a revisar su decisión. Cerrar la RTVV, añadió, es «deteriorar la posibilidad de autogobierno y dejar nuestra cultura y nuestra lengua en vías de extinción» por «la mala gestión» de los sucesivos gobiernos populares. Puig incidió en que la delicada situación financiera del ente público «no es un problema de los trabajadores sino de quienes no han sabido gestionar esta televisión pública y que ahora no pueden acabar pagando todos los ciudadanos». La central Intersindical Valenciana también subrayó «la gran participación» que hubo en las protestas y confió en que Fabra, ante el tamaño de las manifestaciones, «rectifique» su orden de cerrar.