PSOE y PSC se citan en Barcelona para unificar la respuesta contra la consulta
La cumbre de las dos ejecutivas culmina un año en el que han estado a punto de romper .
Pere Navarro y Rubalcaba, en una imagen del pasado mes de diciembre.
Las planas mayores del PSOE y del PSC exhibirán hoy martes en Barcelona una imagen de unidad en su estrategia frente a la consulta independentista que Artur Mas, de la mano de Esquerra Republicana, quiere celebrar el próximo 9 de noviembre. La cita, a la que asistirán Alfredo Pérez Rubalcaba, Elena Valenciano, Óscar López, Antonio Hernando y Ramón Jaúregui, por el PSOE, y Pere Navarro, Antonio Balmon, Miquel Iceta, Esteve Terradas y Núria Parlon, por el PSC, supondrá la escena final del proceso de reconciliación entre ambas fuerzas, después de un año en el que han estado a punto de romper una hermandad fraguada hace 35 años.
La reunión servirá sobre todo para que los socialistas coordinen una hoja de ruta a seguir para tratar de plantar cara al proceso soberanista emprendido por CiU, Esquerra, Iniciativa, y la CUP. El PSOE y el PSC quieren dejar claro que están juntos en el rechazo a la consulta que plantea el nacionalismo catalán, pero no se quieren alinear con el PP y Ciutadans. El socialismo catalán está en contra de la secesión, pero está a favor de que Cataluña celebre un referéndum, aunque solo si es legal y acordado con el Estado, una condición imposible en el planteamiento que ha puesto Mas sobre la mesa.
Esta posición del PSC, por la que aún recibe fuertes críticas desde el PSOE, es el origen de los agrios enfrentamientos que ambas formaciones protagonizaron el año pasado. Hasta dos veces rompieron los socialistas catalanes la disciplina de voto del grupo del PSOE en el Congreso, por votaciones relacionadas con el derecho a decidir de Cataluña, lo que derivó en una crisis que se quedó a milímetros de que las dos formaciones rompieran las relaciones que mantienen desde la Transición. La Declaración de Granada, primero, y la Conferencia Política que celebró el PSOE en noviembre recondujeron la situación.
Heridas
Aunque lo que acabó de restañar todas las heridas y permitió que las relaciones volvieran a su cauce fue el desmarque del PSC del proceso soberanista de Mas. los socialistas catalanes empezaron la legislatura participando en algunas de las comisiones que crearon CiU y ERC para avanzar hacia la consulta. Hasta que en noviembre pasado el Consejo Nacional del PSC acordó por amplia mayoría que no apoyarán ninguna iniciativa legislativa relacionada con la consulta que no haya sido previamente negociada y acordada con el Gobierno central.
El PSC se apeó así del frente pro-consulta y no participó en la negociación de la fecha y la pregunta. Su ausencia no es baladí, ya que CiU, Esquerra, Iniciativa y la CUP no llegan a los dos tercios de los escaños que son necesarios para aprobar leyes importantes, como el Estatut. Eso sí, el PSC, que atraviesa el peor momento de su historia en lo que se refiere a los resultados electorales, está divido, el sector más soberanista amenaza con la ruptura y el próximo 16 de enero podría desertar y volver a romper la disciplina del grupo en el Parlament catalán.