obra editada por el 'BOE'
El Supremo recopila 39 sucesos que perturbaron a la España de los siglos XIX y XX
El libro aborda casos como los que afectaron a 'El Lute' y a Unamuno y el doble magnicidio frustrado contra Alfonso XII
El Tribunal Supremo publicará a finales de mes un libro con dos tomos que recoge 39 sucesos que conmocionaron a la opinión pública española. La obra, titulada 'Los procesos célebres seguidos ante el Tribunal Supremo en sus 200 años de historia', ha sido editada por el 'Boletín Oficial del Estado' y ha sido elaborada por un equipo formado por magistrados y letrados del gabinete técnico del alto tribunal.
El libro comienza con el caso del que fuera consejero de Estado Miguel de Lardizábal, que fue juzgado por sedición tras publicar un manifiesto en 1811 en el que defendía que la soberanía no residía en las Cortes sino en el Rey. El Tribunal Supremo, que fue creado en la Constitución de Cádiz en junio de 1812, anuló la condena de destierro que un tribunal especial designado por las Cortes había impuesto a Lardizábal.
Otros casos que recoge este volumen hacen referencia al magnicidio de Eduardo Dato, a las causas abiertas al fundador del PSOE, Pablo Iglesias, a Indalecio Prieto y a Miguel de Unamuno. También se abordan los crímenes de Casas Viejas, el crimen de Cuenca, el 'caso Jarabo' y la sublevación del general Sanjurjo. La obra se cierra con la causa contra Eleuterio Sánchez, 'el Lute'.
Referencias de la prensa de la época
Estos sucesos son presentados en el libro con una somera explicación del motivo o razón por el que han sido seleccionados y una síntesis de los hechos acaecidos. También se recoge los distintos procesos judiciales hasta que la causa llega al Tribunal Supremo. Para contextualizar mejor los casos, los autores recogen referencias a la prensa de la época.
Uno de los capítulos narra las vicisitudes de Juan Oliva, quien intentó matar al rey Alfonso XII en dos ocasiones. La primera no logró porque se dejó la pistola en su casa de Tarragona y en la segunda, en Madrid, no acertó en el disparo. A pesar de ello, fue condenado a muerte y se le diagnosticó como "un monomaniaco de regicidio" (en el PDF adjunto se puede leer el capítulo de este caso).