Rajoy promete bajar las retenciones a los autónomos y no subir el IVA

«Muy pronto habrá una rebaja en las retenciones de los autónomos». Con esta afirmación el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, desveló ayer otra de las incógnitas que pendían sobre la reforma fiscal

Aunque la medida se daba por descontada, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, no la mencionó durante la presentación del anteproyecto el viernes. Pero Rajoy aprovechó la reunión con la cúpula del PP para anunciar esta rebaja y, de paso, alabó el resto de medidas recogidas en la reforma e insistió en que la rebaja de impuestos es compatible con la reducción del déficit. La reducción de las retenciones de los trabajadores autónomos serán progresivas de tal manera que pasarán del 21% actual al 19% en lo que respecta al tramo general, pero podrán descender hasta el 15% o el 16% en función de los ingresos, según confirmó este sábado el presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor. Una reducción que afectará a 1,5 millones de autónomos, es decir, a la mitad del colectivo.

Con esta rebaja el Gobierno satisface una de las principales reivindicaciones de los autónomos, que también han conseguido que se mantenga el sistema de tributación por módulos. Un régimen que tanto la comisión de expertos presidida por Manuel Lagares como sindicatos y numerosos expertos solicitaban eliminar por considerarla una fórmula que facilitaba el fraude.

Esta cuota de pago se calcula en función del número de trabajadores, potencia eléctrica contratada, superficie del local de trabajo, etc. Sin embargo, la reforma fiscal apenas introduce cambios y la seguirán usando unos 600.000 autónomos. En concreto, el Gobierno la limita para aquellas actividades que facturen directamente al consumidor final, es decir, el pequeño comercio, la hostelería, los taxis... También se mantiene para la agricultura y la pesca. Por su parte, se abrirá un periodo de transición antes de su eliminación para aquellos autónomos que facturen a intermediarios, lo que afecta especialmente a la construcción o el transporte.

Sobre vivienda

Rajoy también anunció que «se mantendrá la fiscalidad de la segunda vivienda». Actualmente los propietarios de segunda vivienda sufren una imputación en el IRPF. Deben incluir el 1,1% de su valor catastral —2% si la revisión catastral es anterior a 1994— y aplicarle el tipo marginal

La comisión Lagares proponía un aumento de su tributación que ahora el presidente descarta.

Durante su intervención Rajoy se dirigió por un lado a sus votantes: «Vamos a hacer lo que siempre hemos querido hacer y no hemos podido: bajar los impuestos a los españoles». Y por el otro a la Comisión Europea, muy escéptica con la reforma presentada. En este sentido, el jefe del Ejecutivo reiteró que no subirá el IVA, una medida que el mismo viernes el comisario de Economía Olli Rehn volvió a reclamar pero que el Gobierno se resiste a tomar consciente del desgaste político que supone y del riesgo de hundir la incipiente recuperación de la demanda interna. «El impuesto sobre el valor añadido, el IVA, no se sube», sentenció Rajoy

Pero al mismo tiempo, el presidente dejó claro que la rebaja en el IRPF de media un 12,5% no supone ningún desvío del Plan de Estabilidad enviado a Bruselas. «Esta reforma fiscal no va a afectar a lo que sigue siendo un gran objetivo que es la consolidación fiscal y la reducción del déficit público», señaló

Sin embargo, la Comisión teme que la rebaja estimada en 7.000 millones en el Plan de Estabilidad ponga en peligro el objetivo de déficit para el próximo año fijado en el 4,2%.