Sánchez regaña a los eurodiputados críticos
Pedro Sánchez no se ha tomado bien las veladas críticas de algunos eurodiputados del PSOE a su decisión de no apoyar la elección del conservador Jean Claude Juncker para presidir la Comisión Europea. El nuevo líder socialista emplazó a estos disconformes a que vayan con él a «una agrupación» y expliquen sus reticencias «a los militantes de base».
El futuro secretario general del PSOE sostuvo tras reunirse con el líder de UGT, Cándido Méndez, que los afiliados socialistas y «muchos votantes» están de acuerdo con no respaldar al ex primer ministro de Luxemburgo para que presida el Ejecutivo comunitario por la respuesta que ha dado Bruselas a la crisis económica, con la única receta de la austeridad. El único eurodiputado socialista que mostró en público sus reparos a no votar a favor de Juncker fue Ramón Jáuregui, aunque respetó la disciplina de voto, pero otros en privado se mostraron en desacuerdo con la orden del nuevo líder del partido.
Sánchez defendió asimismo que su decisión es «coherente» con lo que defendió el PSOE en la campaña para las elecciones europeas del 25 de mayo. «La política -subrayó- tiene que recuperar la coherencia». Negó además que los socialistas españoles se hayan quedado solos en su rechazo porque los franceses, los británicos y los suecos adoptaron esa misma postura.
La jefa de la delegación del PSOE en Estrasburgo, que no votó por encontrarse enferma debido a una intoxicación alimentaria, negó por otra parte que se haya planteado poner su cargo a disposición de Sánchez. Lo hará, no obstante, una vez que el congreso extraordinario del 26 y 27 de julio ratifique la elección de los militantes, como también lo harán los portavoces en el Congreso, Soraya Rodríguez, y el Senado, Marcelino Iglesias. Hasta entonces, Valenciano ejercerá sus funciones con normalidad. La todavía número dos del PSOE aclaró, por si acaso, que compartió la decisión de Sánchez de no apoyar a Juncker porque fue lo que ella misma defendió durante la campaña electoral.
Los rumores sobre las supuestas diferencias entre Sánchez y Valenciano surgieron tras la ausencia de la vicesecretaria general la noche de la victoria electoral del primero y que tampoco participara en la votación para elegir al presidente de la Comisión Europea. Ambas ausencias se debieron a sus problemas con la intoxicación gastronómica, molestias que no impidieron que estuviera en permanente contacto con el futuro secretario general del PSOE.