LAS CUENTAS DE LA COMUNIDAD
El presupuesto de la Junta no crece pero destinará más a inversiones y gasto social
La cifra queda en 9.920,8 millones, pero sube el dinero destinado a las consejerías en 153 millones. . La reducción de la tasa del paro y el mantenimiento del rigor en el déficit siguen como grandes retos.
El presupuesto de Castilla y León para 2015 será de 9.920,8 millones de euros, el 0,37% menos que en el presente 2014 —37 millones—, aunque las consejerías de la Junta dispondrán para el gasto y la inversión de 7.466,1 millones, el 2,1% más —153 millones—. El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, explicó ayer durante una rueda de prensa el contenido del proyecto de ley de Presupuestos de la Comunidad para 2015, del que destacó el cambio de tendencia, ya que es la primera vez en los últimos cinco años que las consejerías dispondrán de más fondos que en el año anterior, aunque añadió que la reducción de la tasa de paro, con una previsión de mejora hasta dejarla por debajo del 20% (19,8%), y el mantenimiento del rigor en el cumplimiento del déficit son las premisas principales de estas cuentas para alcanzar la «coherencia».
Este cambio de dinámica presupuestaria se apoya en una mejoría macroeconómica que se plasma en una revisión al alza de las previsiones que tenía la Junta ya para el presente 2014, al pasar del 0,7% de crecimiento del PIB al 1,4% que se incluye en este proyecto de presupuestos, y que llegará al 2,1% en el próximo 2015.
Techo de gasto
Herrera remarcó también que con este proyecto de ley queda fijado definitivamente el techo de gasto para 2015 en 8.822,9 millones, el 1,08 % más que en 2014, tras incorporar un aumento de las transferencias del Estado y de la UE y una «mayor holgura» en el objetivo de déficit como consecuencia de las nuevas bases del INE para calcular el PIB, como la incorporación de la prostitución como actividad económica.
Componen este gasto previsto como techo los 405,6 millones que tendrá que reservar la Comunidad para pagar los intereses de la deuda pública, los 923 millones de euros para desarrollar en Castilla y León la Política Agraria Común, los 27,3 millones para las Cortes y, fundamentalmente, los 7.466 millones que gestionarán las consejerías.
En el apartado de ingresos, la Junta de Castilla y León prevé recibir por la vía de los impuestos algo más de 5.000 millones de euros (2.000 de los directos y 3.000 de los indirectos) y más de 2.400 millones por las transferencias corrientes, que reducen su aportación el 1,65% respecto a 2014.
Además, Herrera y Del Olmo destacaron la aportación que tendrán a este presupuesto las ventas de inmuebles y parcelas propiedad de la Junta que se prevé con unos ingresos potenciales de 150,8 millones.
Las entregas a cuenta provenientes del Estado se incrementan hasta llegar a los 5.517 millones de euros, el 2,90% más que en 2014, apoyadas en un aumento de casi el 8% de los fondos vinculados al sistema de financiación hasta llegar a los 1.232 millones y una mayor recaudación por el IVA (1.783 millones)y del IRPF (1.774 millones).
De entre los tributos propios, el proyecto de presupuestos plasma la rebaja en la recaudación por el llamado ‘céntimo sanitario’, que tras reducirse la tarifa en dos tercios pasará a aportar 65 millones, el 40,9% menos que lo presupuestado en 2014, que se verá compensado por otros como el impuesto de sucesiones y el impuesto de transmisiones patrimoniales, que experimentan un aumento.