Diario de León

OPERACIÓN PÚNICA CONTRA LA CORRUPCIÓN

Barazón no renuncia aún a sus cargos porque sería admitir su culpabilidad

Sigue la estrategia de su defensa, mientras el PP le da un ultimátum de 48 . horas.

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Un día después de su ingreso en prisión, el presidente de la institución provincial, Marcos Martínez Barazón, aún no había presentado su renuncia como responsable de la Diputación y alcalde de Cuadros. A pesar de que la dirección autonómica del PP le había exigido su renuncia inmediata a estos cargos, sigue sin acceder. Su partido sospecha que su abogado le ha recomendado que no dimita como parte de la estrategia de defensa, ya que dejar estas funciones sería como reconocer su culpabilidad en la trama de la operación Púnica.

La imposibilidad de comunicarse con Barazón, las dificultades para realizar cualquier tipo de trámite en la prisión y el hecho de que sea fin de semana impiden por ahora al PP tomar medidas y ha optado por dar un plazo de 48 horas para que la renuncia de los cargos llegue a la Junta Electoral.

«Plazo razonable»

De lo contrario, sus propios compañeros de equipo de gobierno le presentarán el lunes una moción de censura para desbancarle de su escaño de diputado y de la Presidencia, al igual que harán los ediles de Cuadros para despojarle de la Alcaldía.

«No es fácil conectar con alguien que está en la cárcel, la gestión está iniciada, aunque creemos que es más fácil llegar a él a través de la familia que de su abogado; acceder al centro requiere ciertos trámites que no son inmediatos», dijo ayer el secretario general del PP leonés, Eduardo Fernández, quien expresó el interés del partido en recibir «noticias cuanto antes sobre la renuncia, hemos dado un plazo razonable, si no llega el lunes habrá moción de censura de los diputados del PP, primero para que quede fuera del grupo y luego de la Presidencia».

Fernández aseguró que Martínez Barazón es «consciente ya, por lo que nos cuentan, de la implicación política de su situación, la gravedad, la vergüenza y el hartazgo social le obligan, si le queda algo de respeto en su corazón, ha de dimitir para no complicar más la situación de sus compañeros». Fernández no negó que el partido prefiere «por más simple y rápida» la opción de la renuncia voluntaria del presidente. «Como todos pueden comprender no tiene sentido que presida la Diputación desde la cárcel».

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