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El 'president' siente "pena" por la intención de Torres-Dulce de presentar la querella Defiende el 9-N en términos de libertad de expresión y participación
La lesión que sufrió el sábado en la espalda y que le impidió jugar la final del Masters de Londres ante Novak Djokovic un día después hizo peligrar la participación de Roger Federer en la Copa Davis, pero el tenista suizo parece que saltará a la pista en Lille (norte de Francia) este viernes. "El partido es la única respuesta", ha dicho enigmático cuando los periodistas le han preguntado si estaba recuperado.
El francés Jo-Wilfried Tsonga abrirá la eliminatoria definitiva, que se disputará ante 27.000 personas, frente al suizo Stan Wawrinka, mientras que Federer jugará el segundo encuentro, ante Gael Monfils. El sábado se disputará el encuentro de dobles entre Julian Benneteau-Richard Gasquet (FRA) y Marco Chiudinelli-Michael Lammer (SUI), aunque los capitanes pueden variar las formaciones una hora antes. El domingo se verán las caras Federer y Tsonga, y a continuación, los segundos espadas de cada equipo, Wawrinka y Monfils.
Un buen entrenamiento
Federer, número dos del mundo ya se ha entrenado, aparentemente mejorado de sus molestias en las lumbares. "Las cosas han ido muy bien esta mañana, estoy muy contento y aliviado", ha dicho en la rueda de prensa, aunque también ha recordado que nunca se ejercita al 100% antes de un partido. El suizo, que nunca ha ganado la Copa Davis y juega por primera vez la final, busca completar su impresionante palmarés de 17 títulos de Grand Slam con su primera Ensaladera. Para el equipo francés sería la décima, aunque solo la primera desde el 2001.
Sobre su rival, al que ha batido en 8 de las 10 veces en las que se han enfrentado, ha subrayado que Monfils, número 19 en el 'ranking' de la ATP, "tiene un gran juego y es muy atractivo para ver". "Tengo mucha experiencia en jugar contra Gael --ha añadido--. Sé hasta dónde apretar y cuándo no. Es importante conocer eso". "Pero va a ser duro, también por el público y por la arcilla bajo techo", ha pronosticado Federer.
A su lado, Stanislas Wawrinka, el número dos suizo, ha soslayado la polémica de los últimos días: su tensión con Federer en la semifinal del Masters de Londres tras quejarse de los gritos de Mirka, la esposa del exnúmero uno. "Es duro perder con Roger, tuve cuatro 'match points', pero tengo que extraer cosas positivas de esa semana. Me siento listo y es grandioso que Roger pueda jugar", se ha limitado a decir.