Los presos de Ponent y los mensajeros de Unipost
La querella de la Fiscalía centra su atención en dos hechos que no por menos curiosos pudieran acabar mal para sus responsables: el director de una prisión y el jefe de una empresa de mensajería. El escrito afirma que las papeletas usadas en la consulta y en las que recogen las preguntas de la convocatoria fueron confeccionadas en la imprenta del Centro de Iniciativas para la Reinserción (Cire) instalada en la cárcel de Ponent (Lérida).
Esta imprenta se encargó de la elaboración de todo el material necesario «siguiendo instrucciones del Gobierno autonómico»: sobres, papeletas, instrucciones para los componentes de las mesas electorales, hojas de recuento o urnas. Los presos desarrollaron voluntariamente jornadas de doce horas de trabajo tanto el sábado 18 de octubre como el domingo 19, «urgidos por el Gobierno» de Mas. Culminada la tarea, el Ejecutivo dispuso de seis millones de papeletas para la consulta.
También destaca la Fiscalía los servicios de la entidad mercantil Unipost S.A., especializada en envíos masivos de correspondencia. Esta compañía fue utilizada por los querellados para hacer llegar una carta a los ciudadanos con el membrete oficial exhortándoles a participar en el 9-N.