El PP busca el cuerpo a cuerpo con Podemos para borrar del mapa al PSOE

La precampaña ha comenzado y los estrategas del PP tratan de descifrar el nuevo mapa electoral. La crisis económica, la corrupción, el anquilosamiento, en definitiva, de los partidos tradicionales han desestabilizado el bipartidismo de casi cuatro décadas. Los populares se enfrentan hoy a dos fuerzas, Podemos y el PSOE, y no a una. Pero fuentes del partido llaman a no errar el tiro. Más allá de la coyuntura, la dirección del PP está convencida de que en la carrera de fondo, cuando la tormenta Podemos haya pasado, los socialistas seguirán siendo el rival a batir.

Dos factores juegan a favor del partido que sostiene al Gobierno en su batalla frente al PSOE. Pedro Sánchez no termina de hacerse con las riendas de la formación, y Podemos se desplaza hacia el terreno que antes ocupaban los socialistas. Debilitado y «con poca presencia pública», sostienen en el PP, Sánchez no requiere una atención constante. Es el partido de Pablo Iglesias, que ha sabido aglutinar el enfado de la ciudadanía, el que exige foco y confrontación. Y cuanto más Podemos, menos PSOE. Esa es la ecuación que manejan en el cuartel general de la calle Génova.

Pero también hay intereses particulares que aconsejan a los populares el cuerpo a cuerpo con Podemos. Todos los estudios han detectado una pequeña fuga de votantes suyos hacia el nuevo partido, en torno al 10%, y ese porcentaje aplicado a los once millones que obtuvo el PP en 2011 son un millón largo de papeletas, una cifra que no es para despreciar. De ahí que el duelo con Podemos también pretenda taponar esa pequeña hemorragia. El presidente del Gobierno ha centrado sus últimas intervenciones en el «populismo», «los tristes que pintan España de negro», los «conjuros caribeños» y «la ruleta rusa de la frivolidad». Las bases del PP piden el cuerpo a cuerpo con los que crecen en los sondeos a costa de la «casta». Podemos es, en las encuestas internas del partido, la segunda opción de los españoles. Y fuentes populares, pero también socialistas, apuntan que el próximo barómetro del CIS, que se conocerá esta semana, confirmará que el partido de la ‘Marcha del Cambio’ es el segundo en estimación de voto. Puede que sea un suflé, y puede, como cree el PP, que con el tiempo Pablo Iglesias sea el líder una nueva IU y se haya llevado por delante la fuerza del PSOE. Pero la realidad a día de hoy es que existe y toca la puerta de Moncloa.

Entiende la cúpula del PP que mientras los socialistas tratan de vencer a Podemos, y Podemos busca la moderación para no encasillarse en la extrema izquierda, el centro político ha quedado libre y a disposición de los populares. «De nosotros depende saber aprovecharlo», señalan fuentes del partido. Los análisis de la formación que lidera Mariano Rajoy sugieren que aquellos votantes del PSOE que llegaron decepcionados al PP en 2011, pueden haber emigrado ahora a Podemos.