Tania Sánchez rechaza la invitación de Pablo Iglesias para entrar en Podemos
Apuesta por crear un gran frente de fuerzas de la izquierda no convencional.
La ex candidata de Izquierda Unida a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Tania Sánchez, no se integrará en Podemos. La ya ex dirigente de la formación dirigida por Cayo Lara declinó ayer la oferta que unas horas antes le había formulado Pablo Iglesias para sumarse a su formación. «Me encantaría que toda la gente buena asumiera que Podemos es su instrumento», dijo el eurodiputado con respecto al fichaje de su pareja sentimental. «No, punto», fue la contundente respuesta de ella al ser cuestionada sobre tal posibilidad si bien matizó que no había escuchado ninguna propuesta en ese sentido del «secretario general de Podemos».
Lo que no hizo Sánchez fue cerrar la puerta a una alianza de «todas las fuerzas del cambio», incluido Podemos, para presentar una lista de unidad de la izquierda no convencional en la Comunidad de Madrid. Esta propuesta choca sin embargo con la intención anunciada por Podemos de concurrir en solitario a estos comicios. El secretario de Participación Interna y candidato a secretario autonómico en Madrid, Luis Alegre, recordó ayer que la formación mantiene su intención de competir en cada autonomía bajo sus siglas y valoró que «sería electoralmente absurdo renunciar al tirón de Podemos como marca».
Estatutos
No obstante, los estatutos políticos de la formación establecen que, pese a que presentar listas propias es la mejor manera de competir en las autonómicas, se podrá participar en agrupaciones de unidad ciudadana «si se diesen condiciones específicas». Los estatutos no detallan en qué consisten esas condiciones, pero abren la puerta a una posible alianza electoral con Sánchez y los suyos, una opción que todo apunta a que contaría con el beneplácito del secretario general de Podemos.
«Una decisión difícil»
La ex candidata de IU explicó los motivos que le han llevado a ella y a otros militantes a abandonar la formación, una paso que, según confesó, ha sido la decisión más difícil que ha tenido que tomar a lo largo de su carrera política tras muchos años de militancia. Sánchez cargó las culpas sobre la dirección regional de la coalición, a la que calificó como «un aparato que es la infantería de un modelo nefasto en la Comunidad de Madrid». A continuación acusó a dos de sus máximos responsables, Gregorio Gordo y Ángel Pérez, de haberle declarado la guerra tras imponerse en las primarias para elegir candidato a la Comunidad de Madrid. «La paz tenía un precio, el reparto de sillones y la complicidad pasiva con quien no ha asumido su responsabilidad por el escándalo más negro como es Caja Madrid» dijo en relación a la de Gordo y Pérez, quienes propusieron en nombre de IU a consejeros de Bankia que figuran entre los beneficiados por las tarjetas ‘black’.
La gota que colmó el vaso de Sánchez fue la decisión de la dirección federal del pasado viernes de no expuslar a Gordo y Peréz. El otro factor determinante en su marcha ha sido la posición de la dirección federal que encabeza de Cayo Lara con respecto a posibles alianzas, en las que se mantiene que deben figurar las siglas de IU. Esta restricción choca con la candidatura de unidad ciudadana propuesta por Sánchez, que con su salida de la formación tendrá ahora libertad para «librar una batalla que no le estaba permitida dentro de IU».
La ya ex diputada también renunció a su escaño en el Parlamento regional. «El acta es de Izquierda Unida y se debe quedar en Izquierda Unida», justificó. Su dimisión lleva aparejada la pérdida de su condición de aforada justo cuando la Fiscalía estudia si pide su imputación tras ser acusada por el PP de haber favorecido a su hermano con subvenciones públicas cuando ejercía como concejal en Rivas-Vaciamadrid. La investigación estaba hasta ahora a cargo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, pero al dejar de ser aforada pasará a la justicia ordinaria, algo que retrasará la decisión sobre si es imputada o no. Sánchez defendió su inocencia y se declaró tranquila, como, dijo, demuestra su renuncia al privilegio del aforamiento.
«La vida sigue»
Cayo Lara se declaró sorprendido por la marcha de la ex candidata y lamentó que ella no le hubiese anunciado sus intenciones con antelación. El coordinador federal también afirmó que la dirección brindó un apoyo total a la dirigente en su candidatura electoral. Pese a reconocer el daño que la marcha de Sánchez y los dirigentes que la han seguido daña a IU, Lara concluyó que «la vida sigue» y su partido superará esta crisis.