El PP cambia de logotipo y busca renovar su imagen antes de las elecciones

Hay cambios por los que Mariano Rajoy no está dispuesto a pasar a pocos meses de las elecciones generales. El más importante es el que le afecta a sí mismo. El presidente no cederá en su empeño de volver a ser el candidato del PP en los próximos comicios y no hará borrón y cuenta nueva con las políticas que, según el relato del Gobierno, han sacado a España del abismo de la quiebra. Ahora bien, si lo que toca es ‘renovarse o morir’, el jefe del Ejecutivo ya ha dado vía libre a su equipo de campaña para modernizar la imagen del partido y estrenar, por ahora, formas y logotipo.

«Hemos buscado limpieza y simetría por cero euros», aclaró en la sede nacional un dirigente del partido en referencia al distintivo que ha creado la nueva cúpula capitaneada por el director de campaña, Jorge Moragas. Tras una legislatura marcada por la crisis, la corrupción, la ausencia de interlocución con la sociedad y hasta la confusión en los planteamientos políticos de los populares, el PP ha tratado de diseñar un símbolo «diáfano y reconocible», que conserve la esencia de la formación. «Las siglas son más legibles, porque estamos orgullosos de lo que quiere decir nuestro partido y de su historia, y la gaviota, o el albatros, forma parte del círculo que engloba la centralidad», explicó el vicesecretario de Comunicación, Pablo Casado, que reivindica que los suyos ya jugaron con el «círculo» años antes de que Podemos lo incorporara a su imagen corporativa.

Reafirmarse en el proyecto del PP, denostado en los últimos tiempos por voces internas, y recuperar el centro político son, precisamente, los retos del partido hasta final de año, mientras Ciudadanos amenaza con llevarse a los votantes defraudados con el Ejecutivo de Rajoy. De ahí que Casado señalara ayer la suya como la única opción del electorado que no se haya inclinado abiertamente por la izquierda.

A tan poco de las elecciones, los barones populares abogan, sin embargo, por no perder el tiempo y promover una «renovación» real de «ideas, políticas y actitudes», como señalaba ayer el presidente gallego, que consiga reconquistar a quienes desconfían del PP. Alberto Núñez Feijóo propone que en los próximos meses se diseñe un «plan de trabajo» para la legislatura entrante en el que se vislumbren los asuntos clave del siguiente mandato.

Ese será, en principio, el cometido de Rajoy en la conferencia política de dos días que arranca hoy mismo en Madrid con la intervención de la secretaria general, María Dolores de Cospedal, que ha pasado a un segundo plano desde los comicios del 24M. El presidente, encargado de la clausura, está preparando un discurso, según fuentes de su entorno, en el que se repasa lo conseguido y se esboza el futuro o la hoja de ruta que plantea el PP.

Algunos dirigentes del partido asistirán al encuentro con cierta desconfianza. Más aún cuando la dirección no llevará a la cita ninguna propuesta concreta para ser debatida. El PP, sin embargo, apunta ya en algunas direcciones y ha abierto la puerta incluso a una reforma de la Constitución. Ya no hay temas tabú en un partido que se esfuerza en mostrarse dialogante. La Carta Magna podría ser retocada para actualizar las funciones del Senado, en boca de todos últimamente por la incorporación de algunos de los presidentes regionales que no consiguieron revalidar en las elecciones. Pero los populares tampoco descartan otras modificaciones puntuales.

Lo mismo ocurre con las primarias. Aunque se rechaza el modelo «tramposo» de partidos como el PSOE, Podemos o Ciudadanos, ya nadie duda de que el PP caminará hacia un sistema, al menos similar, que podría avanzar en su programa para las próximas elecciones.

Intervención de Herrera

El presidente del PP y de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, intervendrá hoy con una ponencia sobre empleo, informa Ical.