La Audiencia de Palma reduce la fianza de la infanta a la sexta parte
También abre la puerta a que Castro pueda empezar a embargar sus bienes y cuentas .
La infanta Cristina, en una imagen de archivo.
Primera gran victoria judicial de la infanta Cristina frente al juez José Castro después de más de dos años de derrotas continuas. Pero una victoria en cierta manera pírrica, porque los mismos magistrados que le dan la razón abren las puertas a que Castro pueda empezar a embargar sus bienes y cuentas a pesar de que ya ha ingresado en el juzgado 587.413,58 euros.
La parte positiva para la hermana del rey: la Sección Segunda de la Audiencia Provincial dictó ayer un auto en el que le quita la razón a Castro y rebaja la fianza penal a Cristina de Borbón a la sexta parte, tal y como demandaba la imputada. La caución para afrontar las posibles multas derivadas de una sentencia en la que se le declarara cooperadora necesaria de los dos delitos fiscales de su marido pasa de 2.697.150 a 449.525 euros.
La vertiente negativa del fallo para la ex duquesa de Palma: que los magistrados consideran que los 587.413,58 euros que la infanta ya depositó en el juzgado el pasado 17 de diciembre, solo cinco días antes de que Castro le sentara en el banquillo como cómplice de los delitos de su esposo, no sirven para cubrir los 449.525 euros. Y eso porque el más de medio millón que ya entregó la hija de don Juan Carlos era para cubrir exclusivamente su posible responsabilidad civil (no penal) como responsable civil subsidiaria «a título lucrativo» de los dos fraudes de Iñaki Urdangarín, quien ocultó al fisco 182.005 euros de IRPF en 2007 y 155.138 euros en 2008.
Los magistrados estiman parcialmente el recurso de apelación interpuesto por Cristina de Borbón en el que esgrimía que era desproporcionada una caución de tal volumen cuando, según la acusación popular, apenas había ayudado a defraudar una cantidad algo mayor de los 120.000 euros que lo convierten en delito.
En síntesis, los superiores de Castro dan la razón a la hermana de Felipe VI, quien sin éxito ya había pedido en mayo al propio instructor que rebajara la fianza, al considerarla «aberrante» y «antijurídica». La infanta pedía que se fijara, como ha hecho ahora la Audiencia, la caución en 449.525 euros, pues esa cifra es más acorde con la acusación que pesa contra ella: ser cooperadora necesaria en un fraude conjunto al fisco de 337.143 euros. Una cantidad a la que, defendían sus abogados, habría que sumarle un tercio a modo de multa, hasta llegar a esos 449.525 euros.
La Audiencia da por bueno el argumento de Cristina de Borbón, que consideraba «manifiestamente injustificada» la decisión de José Castro de admitir la petición de Manos Limpias de que a la hermana menor del jefe del Estado se le aplicara la fianza más alta posible, o sea el séxtuplo de la cantidad defraudada por su marido. Se quejaba la infanta de que el magistrado aceptara la reclamación de la acusación popular a pesar de que «no fundamentó» por qué se pedía la pena máxima a la infanta, cuando no concurría en su caso «agravante alguna».
En el actual momento procesal -explica la resolución- y «sin prejuzgar en absoluto ni la comisión delictiva y circunstancias concurrentes, ni la pena que pudiera corresponder», algo que deberá establecer el tribunal que juzgue el caso Noós, los magistrados insisten en que no consideran que la fianza de casi 2,7 millones fijada por Castro sea «proporcionada con los hechos, con la participación y con las circunstancias preliminarmente concurrentes».