Las pesquisas de la policía española hicieron posible el arresto
Los agentes rumanos llegaron hasta el escondite de Morate gracias a la información que le proporcionó la Policía Nacional española y supieron que estaban en el lugar adecuado al ver aparcado delante del bloque el Seat Ibiza verde, con matrícula 1062CPF y un golpe en una puerta, de la fuga.
Después de saber que el sospechoso había cruzado el martes a Francia por el paso gerundense de Portbou, los agentes españoles lograron detectar la señal del teléfono móvil que el presunto asesino había adquirido en Cuenca antes de iniciar su fuga, rastro que les orientó hacia Rumanía. Ese dato enseguida casó con otro. La gran amistad de Morate con un ex recluso rumano de 27 años con el que coincidió hace cinco años en la cárcel de Cuenca, a donde le llevó la exhibición por Internet de unas fotos de contenido sexual de una ex novia, a la que se las sacó por la fuerza y tras encerrarla.
La policía rumana confirmó que tiene bajo custodia y en lugar seguro el Seat Ibiza de la huida, de gran importancia para la investigación porque podría haber sido el vehículo utilizado para trasladar los cadáveres al paraje del río Huecar donde los enterró en cal viva.