La CUP rechaza la oferta de Mas de ceder poder a Junqueras, Romeva y Munté

Antonio Baños aconsejó el martes a Artur Mas que, parafraseando una pancarta del 15-M ('Si te sientes imprescindible, ve a casa y vuelve mañana'), volviera "el jueves", es decir, hoy. Y esta tarde le dirá que vuelva en enero. Mas no será investido 'president' en la segunda votación de la sesión parlamentaria, la que exige solo la mayoría simple. El entorno político-periodístico hizo hincapie en la referencia temporal ('el jueves') que hizo Baños, pero no en el sentido de dicha pancarta, que no era otro que la CUP pactará cuando Mas deje de sentirse imprescindible para liderar el 'procés'. Cuando todas las propuestas que le ofrece Junts pel Sí dejen de incluir la adjudicación de la presidencia al líder de CDC.

Cumbre en el Palau de la Generalitat a las cuatro de la tarde, a la vieja usanza de los tiempos de la lista única y, antes, del 9-N. Medios arremolinados ante la puerta de la plaza Sant Jaume (lo que los anticapitalistas querían evitar) y convertidos en 'paparazzi' a la que corrió la voz de que la representación de la CUP (Antonio Baños, Anna Gabriel, Benet Salellas) salía del cónclave. Con cara de pocos amigos, por cierto. Además de los de la CUP y el 'president', asistieron a la reunión Oriol Junqueras y Marta Rovira (firmes aliados de Mas), Josep Rull y el 'conseller' Francesc Homs. Fuentes de Junts pel Sí señalaron a este diario que Mas ha llevado buena parte de los contactos con la CUP en solitario.

En la reunión, Mas ofreció aligerar su cartera de responsabilidades como presidente de la Generalitat y descargar competencias. En concreto, la oferta preveía el siguiente reparto: Junqueras como vicepresidente y 'conseller' de Economia i Hisenda sería también el presidente de la comisión delegada de Economia i Ocupació que coordinaría cinco departamentos. Munté y Romeva, presidentes, asimismo, de sendas comisiones delegadas se harían cargo de cuatro cada uno. La hoy vicepresidenta en funciones tomaríaPresidència, Salut, Ensenyament y Cultura. El que fueracabeza de lista de Junts pel Sí el 27-S, Exteriors, Interior, Governació y Justícia. Ello no satisfizo a los anticapitalistas que, a su vez, se mostraron abiertos a la permanencia de Mas en el Govern siempre que no fuera como jefe del Ejecutivo.La creación de tres vicepresidencias llevaría implícita una reforma de la ley de la presidencia de la Generalitat y del Govern. Todo ello en una legislatura ya de por sí corta y en la que la presidencia de Mas podría ser aún más breve, a la luz del riesgo de inhabilitación por parte delTribunal Constitucional.

Por cierto, horas antes el dirigente de CDC Jordi Turullhabía negado en TV-3 que una de las opciones para seducir a la CUP fuera vaciar de contenidos la presidencia para que el líder convergente pueda seguir. "Mas no será un "'president' florero" , sentenció.

Tras la reunión la CUP señaló que no había motivo para convocar una asamblea, pues no se estaba a las puertas de un pacto y ERC reiteró "su firme compromiso" con Mas.

En las horas previas, varias voces de Junts pel Sí habían advertiédode que entre la primera y la segunda votación (entre martes y jueves) se producirían movimientos que podrían desembocar en un pacto. Sin embargo, por la mañana Baños descartó un cambio de voto para la segunda votación: "Si presentan al mismo candidato, haremos lo mismo que habíamos dicho", aseveró el diputado. Nada nuevo, por otra parte.

Tras la votación de este jueves, se abre un paréntesis de dos meses, hasta el 9 de enero. Un intervalo que, además, contará con la campaña y las elecciones generales del 20-D. Fuentes de CDCremitieron a ver qué pasa en esa fecha. En tanto, no es difícil anticipar que el cerco sobre la CUP será encarnizado y la tensión,máxima.