El PSOE promete dos años de cotización extra por hijo a las madres trabajadoras
Dejar de trabajar para cuidar a los hijos ya añade meses de cotización a la Seguridad Social. Fue una de las novedades de la reforma de las pensiones aprobada en 2011 bajo mandato socialista y desarrollada después durante el del PP: 112 días por cada hijo o menor adoptado o acogido (para solo uno de los progenitores), hasta un tope de cinco años. Los socialistas quieren ir ahora más lejos
Ayer prometieron que si llegan al Gobierno elevarán la cifra a dos años por infante para «todas las mujeres». La medida, de la que por ahora hay poco detalle, forma parte de un paquete de propuestas encaminadas a mejorar la «conciliación y corresponsabilidad» de hombres y mujeres que presentaron al unísono la coordinadora del programa electoral y número dos del PSOE a las elecciones generales, Meritxell Batet, y el ex ministro Jordi Sevilla, encargado de la oferta económica.
Batet argumentó que a su partido le mueven tres objetivos, «pasar de vivir para trabajar a trabajar para vivir, potenciar el disfrute de la vida y del ocio, así como del derecho de los niños a estar con sus padres, cosa que —adujo— ahora no ocurre por el mal uso que hacemos de los tiempos». Así, propuso crear un sello que reconozca a aquellas empresas que permiten a sus trabajadores tener un «horario racional» y que les permita beneficiarse de deducciones en el impuesto de sociedades y de «una valoración positiva adicional en cuanto a ofertas de contratación pública».