Cerrar

Arístegui jamás ha hecho públicas las cuentas de su firma comisionista

Rajoy ve «absolutamente normal» el negocio del embajador y de Gómez de la Serna.

Publicado por
M. Sáiz Pardo | data
León

Creado:

Actualizado:

Karistia S.L., la empresa que el embajador en la India, Gustavo de Arístegui, ha venido usando en los últimos años para cobrar comisiones a empresas españolas por la intermediación en negocios en África y Latinoamérica, es totalmente opaca a la Administración, casi fantasma. Es más, aparece en los documentos oficiales como una firma durmiente, sin ningún tipo de actividad.

Karistia, según revelan los documentos en poder de ColpisaA, jamás ha cumplido su obligación legal de presentar sus cuentas públicas al cierre de cada ejercicio anual ante el Registro Mercantil. No lo ha hecho ni una sola vez desde que fuera creada el 16 de diciembre del 2009, cuando Arístegui era todavía diputado por Zamora en el Congreso de los Diputados, puesto que siguió ocupando hasta finales del 2011.

Los cuatro llamamientos y requerimientos del Ministerio de Economía para aclarar las cuentas de esa empresa han sido en vano. No ha presentado sus cuentas durante cinco ejercicios completos. Economía abrió en abril y noviembre del 2011 dos expedientes administrativos por «infracciones por incumplimiento de las obligaciones establecidas en la Ley de la Función Estadística Pública» a la firma de Gustavo de Arístegui, cuando el embajador era aún diputado. Los expedientes, sin embargo, no consiguieron que Karistia hiciera públicos sus números, que a día de hoy son imposibles de consultar en los registros.

La empresa, que tiene como objeto social el «asesoramiento fiscal de todo tipo de personas físicas y jurídicas» y que fue fundada con apenas 3.000 euros de capital, sigue siendo legalmente controlada en su totalidad por el diplomático a pesar de que Arístegui, al ser nombrado embajador hace tres años y medio, tiene prohibido por la Ley de Función Pública el desarrollo de cualquier actividad o cargo que pueda comprometer su imparcialidad.

El ex diputado sigue siendo, a día de hoy, administrador único de la compañía. El diplomático alega que cuando tomó posesión al frente de la legación hizo un documento privado ante notario para dejar a su hijo, Borja de Arístegui, como administrador único de la sociedad y que ese cambio no se elevó al registro por haber un embargo de la Seguridad Social. Sin embargo, fuentes registrales explicaron que no se pueden realizar variaciones legales en una firma cuando hay expedientes en marcha por la no presentación de las cuentas. El diplomático, por tanto, sigue siendo a todos los efectos el único responsable de Karistia, firma que, por otro lado, tiene abiertos dos procedimientos con Hacienda, uno con la Seguridad Social y otros con una administración local.

Empresas españolas

Según informaron ayer la Cadena Ser y El Mundo , el diputado del PP Pedro Gómez de la Serna, a través de su empresa Scardovi, y Arístegui, a través de Karistia, cobraron comisiones millonarias en el extranjero a empresas españolas. Los dos políticos facturaban a empresas nacionales por gestiones para obtener contratos de obra pública en el exterior bajo la marca internacional Voltar Lassen, dinero que luego era transferido a sus respectivas empresas

Voltar Lassen suscribió contratos con casi una veintena de compañías entre 2010 y 2014 para «la búsqueda, identificación y análisis de oportunidades en los países acordados para la realización de cualquier actividad industrial o empresarial».