Rajoy solicitará al rey que proponga primero al Congreso su investidura

Mariano Rajoy será finalmente, como se había previsto en origen, el primero en someterse a una sesión de investidura en el Congreso, aunque sus posibilidades de ser elegido presidente del Gobierno tanto en primera como en segunda votación sean nulas. El PP y el propio monarca se esmeraron en dejarlo claro. En su primera audiencia de la mañana, con el diputado de Compromís Joan Baldoví, Felipe VI avisó de que, salvo que él le pida de manera expresa lo contrario, su intención es seguir el «orden natural» y proponer que, como líder de la lista más votada, sea el jefe del Ejecutivo en funciones quien intente antes que nadie la reelección. El portavoz popular en la cámara baja, Rafael Hernando, aseguró, por su parte, que su jefe de filas trasladará al rey su «firme voluntad» de ir ya al debate.

Los mensajes de uno y otro zanjan la hipótesis que ya habían empezado a barajar tanto en el PP como en el PSOE sobre la posibilidad de que el jefe del Estado optara por proponer la investidura de Sánchez ante la evidencia de que Rajoy no cuenta con más apoyo que el de sus 123 diputados y el hecho de que varias fuerzas minoritarias han dejado, en cambio, la puerta abierta a un eventual acuerdo con los socialistas. Incluso el ministro de Justicia, Rafael Catalá, llegó a poner voz a una idea que el miércoles, en su partido, sólo se comentaba en privado. «No hay que descartar que pueda ser», dijo.

Catalá, como las fuentes de su formación, dejó claro que para que ese escenario sea factible, aún así, el secretario general del PSOE tendría que comunicar hoy en su audiencia a don Felipe que ya tiene apoyos firmes con los que sumar más que el PP; algo harto improbable si se tiene en cuenta que los socialisas no han abierto aún negociaciones formales con el resto de partidos, aunque sí hayan empezado a sondearles y a hacerles guiños significativos.

Es cierto que hacia Sánchez existe mucha mejor predisposición que hacia Rajoy, contra quien varias formaciones han anunciado ya su veto. Pero son pocos los que han avanzado un sí definitivo; solo En Marea (6 diputados) y Nueva Canarias (cuyo representante se cuenta entre los 90 socialistas, porque se presentaron a las elecciones en coalición). El resto, por ejemplo IU y Compromís, apuestan por un Gobierno progresista, lo mismo que En Comú.

No hay pues una mayoría alternativa ya efectiva al PP. Pero en caso de que hubiera alguna duda al respecto, el propio PSOE se preocupó de despejarlas. Aunque aseguró que si el rey optara por designar como primer candidato a su líder este asumirá la encomienda sin poner pega alguna, su portavoz, Antonio Hernando, argumentó que la «normalidad constitucional» marca que en primer lugar se proponga al candidato más votado en las urnas.