Iglesias adelanta un no con matices a PSOE y C’s
La cuadratura del círculo que tanto ansía el PSOE, una abstención de Podemos en la investidura de Pedro Sánchez y un sí de Ciudadanos, PNV, IU y Compromís, para gobernar desde la centralidad, tendrá que esperar… Si es que llega. Pablo Iglesias lo dejó bien claro. El pacto de los socialistas con Albert Rivera no le llevará a levantarse de la mesa de negociaciones a la que, por fin, accedió a sentarse esta semana, pero cualquier opción que no sea la que él propuso casi a traición el 22 de enero, tras su primera audiencia con el rey -un Ejecutivo del PSOE en coalición con él como vicepresidente-, tendrá su «no».
A estas alturas, Podemos tiene claro que no se puede permitir el lujo de ir a unas nuevas elecciones si entre el electorado progresista cala la idea de que son ellos quienes han estado poniendo palos en las ruedas a un Gobierno alternativo al del PP.
Ahora, su relato es radicalmente distinto. «Nosotros vamos a estar en la mesa de negociación hasta el final», dijo horas después del acuerdo PSOE-C’s.