ESTAFA CON LA CONTRAVENTA DE SELLOS
La Audiencia Nacional decide mañana si la cúpula de Afinsa ingresa en prisión
La Audiencia Nacional decidirá mañana si decreta el ingreso inmediato en prisión de la cúpula de Afinsa, condenada hoy a penas de hasta 12 años de cárcel por la estafa agravada que afectó a unos 200.000 inversores de la filatélica, intervenida en 2006.
Así lo ha acordado la sección primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional en una providencia, a la que ha tenido hoy acceso Efe, en la que emplaza a siete de los once condenados, entre ellos el expresidente de la compañía Juan Antonio Cano y el fundador del grupo Albertino de Figueiredo, a una vista programada para las 11:00 horas.
Junto a ellos, también están llamados el exconsejero Carlos de Figueiredo, el exmiembro de la comisión de auditoría de Afinsa Vicente Martín Peña, el exresponsable de contabilidad Emilio Ballester, el exsecretario del consejero Joaquín José Abajo y el proveedor de sellos, Francisco Guijarro.
A todos ellos, con condenas que oscilan entre los 6 y los 12 años de cárcel, la sala les ha aplicado el tipo agravado de estafa al considerar el perjuicio masivo ocasionado a las "víctimas" que "perdieron los ahorros que guardaban para la jubilación o para hacer frente a situaciones de crisis".
La decisión del tribunal se produce después de que las acusaciones de Adicae y de la Asociación de perjudicados de Castilla y León hayan solicitado la rápida entrada en prisión de los condenados al percibir un posible "elevado riesgo de fuga".
En un comunicado, Adicae ha acogido con agrado que la Audiencia Nacional "rectifique" y ha anunciado que respaldará los argumentos que expondrá mañana la Fiscalía Anticorrupción.
El fallo conocido esta mañana cataloga de ficticio el negocio puesto en marcha por Afinsa ya que carecía de sentido económico y se basaba en una sobrevaloración constante de sellos que no tenían valor intrínseco.
Asimismo expone que los clientes, "no informados y crédulos", invertían en la medida que se les prometía la devolución de su dinero, incrementado con un interés muy superior a los que ofrecían las entidades financieras de la época.