El rey Felipe aplaza por segunda vez el viaje a Arabia Saudí
La muerte de un hermano del monarca saudí obliga a cancelar a última hora la visita
El rey Felipe VI ha cancelado a última hora el viaje que tenía previsto iniciar hoy sábado a Arabia Saudí por la muerte del príncipe Turki bin Abdelaziz, hermano del rey Salman, según han informado fuentes diplomáticas españolas. La Casa Real saudí ha anunciado que se decretan tres días de luto oficial por la muerte del príncipe Turki, fallecido durante la madrugada de hoy sábado, y que el funeral tendrá lugar esta tarde en Riad.
Se trata de la segunda cancelación que sufre este viaje, aunque en la primera ocasión, en febrero pasado, se debió a la situación política del Gobierno en funciones en España y por el revuelo ocasionado por la reciente ejecución de 47 personas.
AGENDA POLÍTICA Y ECONÓMICA
El viaje anunciado por la Casa del Rey tenía una duración prevista de tres días de duración con el propósito de reforzar las relaciones bilaterales e impulsar las relaciones comerciales y empresariales con un país que tiene una notable importancia en la región del Golfo Pérsico. Junto al Rey también tenían previsto viajar el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Alfonso Dastis; el de Fomento, Íñigo de la Serna; el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Julio Gómez-Pomar; el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz; el vicepresidente la CEOE, Joaquim Gay de Montellà; el director de Relaciones Institucionales de la patronal, Narciso Caso; y representantes de la Cámara de Comercio de España, entre otras personalidades.
Partidos como ERC o Podemos han criticado abiertamente el viaje oficial a Arabia Saudí y Ciudadanos ha reclamado a Felipe VI que lo aproveche para defender los derechos humanos en el país. No obstante, el Gobierno ha defendido la conveniencia de que el Rey se desplace a Arabia Saudí con el pretexto de que hay "intereses de España en juego". De hecho, el viaje del Monarca podría servir para desbloquear la compra de cinco corbetas a Navantia por parte del régimen saudí, lo que permitiría dar trabajo durante cinco años a los astilleros de Ferrol (A Coruña) y San Fernando (Cádiz).