Cerrar

Zapatero lanza la candidatura de Susana Díaz al liderazgo del PSOE

El expresidente del Gobierno asiste en Jaén a un acto por el aniversario de la ley de dependencia.

Susana Díaz y el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero en el acto de Jaén. JOSE MANUEL PEDROSA

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

p. de las heras | madrid

El mismo día en el que se conoció, hace casi un mes, que el PSOE andaluz preparaba un gran acto para el 16 de diciembre empezó a correr en las federaciones socialistas el rumor de que la presidenta de la Junta aprovecharía la ocasión para lanzar su candidatura, si no oficialmente, sí de manera simbólica, a la secretaría general del partido. Y algo así ocurrió ayer en Jaén. La dirigente autonómica guardó, como siempre, la ropa y evitó pronunciar palabras excesivamente comprometedoras sobre sus planes de futuro, pero José Luis Rodríguez Zapatero fue menos discreto.

«En la vida no se puede perder la elegancia pero lo que sí se puede perder es la timidez, y yo -dijo el expresidente del Gobierno casi como colofón al macroencuentro- deseo expresar todo mi afecto, todo mi cariño y todo mi apoyo a Susana Díaz». No hizo falta mucho más. Sobre todo porque a nadie se le escapa en el PSOE que el exsecretario general apuesta sin ambages por la presidenta de Andalucía como líder desde hace mucho tiempo. «La fuerza del PSOE y la fuerza de ganar la representan Susana Díaz y Andalucía», llegó a decir también durante su intervención.

En el entorno de la presidenta andaluza defienden que es pronto para dar nada por sentado e insisten en que el acto de ayer sólo tenía como objeto reivindicar la historia del PSOE y conmemorar, más concretamente, los diez años de vigencia de la ley de dependencia aprobada por el Ejecutivo de Zapatero. Pero, sea como fuere, la cita -que reunió a unas 3.000 personas, según fuentes socialistas- sirvió de excusa para que Díaz volviera a hacer, de facto, el discurso de una ‘número uno’ del partido. Algo que se repetirá hoy en la clausura del Comité del Mediterráneo de la Internacional Socialista en el que el PSOE ejerce como anfitrión, en Málaga.

Estaba previsto que en ese otro cónclave interviniera el presidente de la gestora, Javier Fernández, pero finalmente no será así.

Díaz no defendió abiertamente la decisión de dejar gobernar a Mariano Rajoy que tanta división generó en su partido, algo que sí hizo Zapatero, pero sacó pecho por la «oposición útil» que está desempeñando su partido e incluso se atrevió a asegurar que el PSOE ya «se ha levantado» y «está fuerte». «Octubre ha sido dificil y algunos pensaban que íbamos a perder la centralidad, que nos iban a arrinconar. Hoy podemos mirar a los ojos a los niños y decirles que se acabaron las reválidas que segregaban. Y podemos mirar a los ojos a miles de trabajadores que han recibido la subida del 8% en el SMI», presumió.

Zapatero, que alentó hace tres meses la rebelión de los barones que acabó forzando la dimisión de Pedro Sánchez, llegó a presumir de que a él siempre se le han dado bien los congresos federales. Y en un discurso plagado de mensajes a los ‘sanchistas’ («mantengamos los afectos entre nosotros») se mostró triunfalista.

El caso es que no todos comparten el entusiasmo del exjefe del Ejecutivo hacia la dirigente andaluza. Ni siquiera entre quienes, a finales de septiembre, participaron en el motín contra Sánchez para evitar que intentara formar un Gobierno en minoría con el apoyo, siquiera tácito, de los independensitas o que llevara al PSOE a unas terceras elecciones.

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, marcó ayer distancias de manera clara durante un desayuno informativo y abogó por buscar un liderazgo «convergente» para evitar que el partido vuelva a quedar divido en dos después del congreso.

Cargando contenidos...