Una legislación penitenciaria que se renueva 37 años después
Durante su ‘puesta de largo’ ante el Congreso, el nuevo titular de Interior aprovechó para anunciar una extensa batería de reformas legales y de futuros órganos. El más importante anuncio fue la «actualización» de la Ley Orgánica General Penitenciaria», vigente desde 1979 y la «armonización» de las normas que la desarrollan -Reglamento Penitenciario y el extenso cuerpo de instrucciones y circulares-. En particular, Zoido propuso cambios en la regulación de la libertad condicional, ya que el vigente Código Penal la fija como forma de suspensión de la pena, «cayendo en serias contradicciones» con su regulación por parte de la Ley General Penitenciaria, como forma de cumplimiento del último periodo de la condena. «Esta divergencia impide su aplicación homogénea y provoca desajustes que, en última instancia, perjudican al sistema en su conjunto», apuntó.
Además, habrá cambios en el reglamento penitenciario de 1981, sobre todo para incrementar la protección de los funcionarios frente a eventuales agresiones de los internos, en línea a la Proposición no de Ley avalada por los grupos Popular, Socialista y de Ciudadanos. Zoido anunció su intención de cerrar un pacto de Estado sobre la violencia de género y la creación de un Centro Memorial para las Víctimas del Yihadismo en Madrid.