Cerrar

Detienen en Bilbao y Las Palmas a dos yihadistas radicales

Tenían intención de realizar un atentado de «gran envergadura y repercusión».

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

melchor sáiz-pardo | madrid

La Guardia Civil y la Policía detuvieron ayer en Las Palmas y Bilbao a dos presuntos yihadistas con, según el Ministerio del Interior, un alto grado de radicalización. El arrestado en la capital grancanaria había manifestado «su clara intención de realizar un atentado terrorista de envergadura y repercusión», mientras que el capturado en la capital vizcaína fue procesado por Baltasar Garzón en 2005 por financiar a Al Qaeda junto a otros seis magrebíes, pero fue absuelto por la Audiencia Nacional en septiembre de 2007 por falta de pruebas.

El detenido en Canarias, de 33 años de edad, marroquí y en situación irregular en España, «había experimentado un aumento significativo en su nivel de radicalización en corto espacio de tiempo». La Policía, que lo vigilaba desde 2012, asegura que había adoptado una estética fundamentalista tanto en su aspecto físico, como en su forma de vestir.

La investigación comprobó que el detenido desarrollaba una extensa actividad en redes sociales, en las que publicaba contenidos en apoyo a Daesh, compartía vídeos violentos ensalzando el martirio, aprobaba la comisión de atentados terroristas e incluso posaba junto a su esposa e hijo menor con armas blancas y con ropa con emblemas del Estado Islámico. Toda esta actividad era llevada a cabo por el detenido con diversas técnicas de enmascaramiento de identidad en la red para eludir el control policial.

El argelino Samir Mahdjoub, de 44 años y más conocido como ‘Sami Menardo’, fue detenido en Bilbao y tenía una actividad en Internet «especialmente intensa» a través de una «maraña» de perfiles en Facebook. El arrestado fue detenido en 2005. La Fiscalía pidió entonces para penas de entre siete y 20 años de cárcel, pero quedaron en libertad.

Ahora, según informa el Ministerio del Interior, el arrestado había vuelto a radicalizarse, incurriendo en un retraimiento social casi total, con muy contadas salidas de su domicilio.