El Gobierno deberá responder sobre las iniciativas que apruebe el Congreso
m. e. alonso | madrid
La dinámica del Gobierno de guardar en un cajón las iniciativas no legislativas impulsadas por la oposición en el Congreso de los Diputados va a resultarle más complicada a partir de ahora. El pleno del Congreso aprobó por unanimidad ayer una propuesta del PNV para que el Ejecutivo explique qué hace o qué no hace con las resoluciones sin fuerza de ley que saca adelante la Cámara baja.
La proposición no garantiza en ningún caso que todo lo aprobado se cumpla, pero sí sirve para aumentar la presión al partido que ocupa La Moncloa. Consiste en establecer un mecanismo por el cual, durante el primer mes hábil de cada periodo de sesiones –dos veces al año-, el Gobierno rinda cuentas a través de un «informe detallado» en el que consten las iniciativas pendientes de cumplimiento de periodos anteriores.